Independiente sufrió mucho para obtener el Metropolitano de 1970. En la parte final del torneo, perdió algunos partidos de manera inesperada. Uno de ellos, el 5 de julio, por la 18ª fecha, cuando enfrentó en Avellaneda a Vélez.
Fue la tarde en que el delantero del equipo de Liniers, el inolvidable Miguel Angel Benito, a quien apodaban El Fantasma, anotó el único tanto, olímpico, a Miguel Angel Santoro.
En ese partido memorable para Benito, Vélez alineó así: Marín; Gallo, Zóttola, Nieva y Sinatra; Ríos, Romero y Willington; Maturo, Benito y Lapalma. El árbitro fue Lugones.
De todas formas, el Rojo fue campeón al derrotar en la última fecha a Racing. Benito, nacido el 16 de agosto de 1948, llegó a conformar con Bianchi y Bentrón, las tres “B” de una ofensiva clásica de Vélez.
El “Fantasma” había comenzado a jugar en Quilmes. Tuvo su mejor partido en 1969, cuando los del sur enfrentaron, justamente a Vélez, su futuro club, que ganó 3 a 2, pero los dos goles cerveceros los hizo Benito. Ello dio pie para que los de Liniers lo contrataran para la próxima temporada.
Tras su paso por Vélez, en 1975, Benito fue transferido a Estudiantes de La Plata y luego se incorporó a Rosario Central, finalizando su trayectoria como futbolista en 1979, en los campeonatos colombianos, para más tarde dedicarse a la dirección técnica.
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