Un coleccionista que pagó más de 7.000 euros por la camiseta que llevó el francoargentino David Trezeguet en la final del Mundial `98 entre Francia y Brasil se quiere “matar” ya que en la aduana se la hicieron trapos. El hombre en cuestión, ciudadano francés de Annemasse, compró la camiseta a un brasileño a través de una página de Internet, pero cuando se disponía a recuperar el paquete enviado por el servicio de correos, le explicaron que la camiseta fue destruida por considerarla los responsables de la aduana que podía tratarse de un objeto falsificado. “Me volví loco”, contó el coleccionista, que consideraba la camiseta de Trezeguet, actual jugador del Hércules, de la Liga española, “como la última pieza de su colección”.