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En el hipódromo de San Isidro Dark Love y Neverwalkalone volaron alto y se llevaron el Juvenile (G1) y el Juvenile Fillies (G1), respectivamente.
Después de seis temporadas las Carreras de las Estrellas volvieron al Hipódromo de San isidro, que dividió en dos jornadas el mitin al mejor estilo de la Breeders' Cup norteamericana. Este viernes fue el turno de los representantes de la generación 2020 que tiene dos nuevas figuras para apuntar a lo más alto del proceso selectivo del segundo semestre.
Dark Love (In The Dark) brilló al quedarse con el Gran Premio Estrellas Juvenile (G1-1600 metros) en el que se impuso por 7 cuerpos a Empeñoso Craft (Mastercraftsman), que atropelló en el epílogo pero cuando el entrenado por Enrique Martín Ferro ya estaba llegando al disco en 1'34"18/100.
En su primera presentación en el césped, tras dejar notable impresión al salir de pobre en la arena del Argentino, el representante de la caballeriza San Isidoro, conducido por Eduardo Ortega Pavón alternó la segunda y tercera ubicación, detrás del puntero Iron Forge (Forge), hasta que en los 450 dominó por fuera y no hubo más para nadie.
Seguramente seguirá el camino al Gran Premio Polla de Potrillos (G1) del mes de septiembre, la misma carrera que consagró a su padre en 2016. Por ahora domina un ránking muy cambiante pero deberá consolidar la brillante imagen que dejó en un exigente segundo semestre.
Neverwalkalone le puso música al Juvenille Fillies (G1)
Un festejado 1-2 obtuvo el stud RDI en el Gran Premio Estrellas Juvenile Fillies (G1-1600 metros), pero la que ganó, en forma brillante, no fue la hasta ese entonces invicta No Fear, sino su compañera Neverwalkalone, ambas nacidas en Brasil e hijas del padrillo japonés Agnes Gold, pero con campaña completa en nuestro país.
Como lo había hecho en ocasión de su único triunfo, la pupila de Dany Etchechoury vino a las perdidas y arriba, de la mano de Adrián Giannetti, voló al igual que su compañera, que es entrenada por Alfredo Gaitán Dassié, para dar cuenta de Elvitas (Cosmic Trigger) que había manejado el ritmo de carrera.
En el disco la vencedora puso dos cuerpos sobre su compañera, con la que ahora comparte récord: dos victorias en tres salidas a la pista. Todo en 1’34”92/100, buen registro para una pista que de a poco se va haciendo más ligera.
Ser Sincero también se impuso por demolición
En el Clásico Estrellas Junior Sprint (G3), Ser Sincero (Fortify) dominó de extremo a extremo, dejando como escolta a Salteño Pass (Distintctiv Passion), al que superó por cinco cuerpos en 55”88/100, manteniendo el invicto en dos presentaciones después de su contundente estreno palermitano.
Francisco Leandro Fernandes Goncalves llevó al triunfo al potrillo criado por el Haras Vacación, que mantuvo el invicto en dos salidas a pista. María Fernanda Álvarez entrena al representante de la caballeriza J.A., que pinta para cosas mayores en las pruebas para sprinters.
Despacito no tuvo problemas con los kilos
La cuota de jerarquía de la jornada sanisidrense se cerró con el Clásico Juan Carlos Etchechoury (NG-1200 metros), en el que se impuso Despacito (Sabayón), mostrando su guapeza sobre la pista de arena.
El pupilo de Lucio Pera accionó expectante hasta los 250 donde pasó de largo, con la conducción de Facundo Coria. Acosado desde cerca por Candy Cure (Señor Candy), siguió rumbo al disco al que arribó en 1'10"65/100 con tres cuartos de cuerpo de ventaja sobre el citado, sin sentir los 63 kilos que debió cargar sobre su lomo.
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