No hubo famosos, solo familiares y amigos íntimos: sí estuvieron su ex esposa, Raquel Bermúdez, y su última pareja, Valeria Dolhagaray. Más allá del conflicto que había entre el humorista y su ex, ellas se saludaron. También estuvo la mamá del fallecido, Karina Ranni, la ex mujer de Miguel Angel Pierri, y su esposo, Marcelo Biondi, quien fuera socio y amigo del abogado.
El cortejo fúnebre arribó al cementerio minutos después de las 13 y por expreso pedido de la familia de Leo Rosenwasser, no se había realizado velatorio ya que él así lo había pedido a su novia en alguna charla cuando hablaron del tema. El féretro del humorista fue depositado en el Panteón de Actores del Cementerio de la Chacarita.
Su ex mujer, Raquel Bermúdez, con quien mantuvo un fuerte conflicto mediático en los últimos meses, acompañó a sus dos hijos, Baltazar y Martina (recordemos que Camila es de un matrimonio anterior). Cuando llegó, se saludó con Valeria Dolhagaray, quien fuera la novia de Rosenwasser desde mediados de 2016 y quien estaba con el humorista en el apart hotel en el que vivían, cuando él sufrió el infarto que terminó con su vida en la madrugada del viernes. Se realizó una ceremonia con un círculo muy íntimo como dispuso la familia. Pasaron por la capilla y luego fueron al Panteón de Actores. Se vivieron momentos de mucha emoción. Una desconsolada Bermúdez, quien estuvo casada 22 años con el actor, estuvo largo rato abrazando a su hija menor, que llevaba una rosa roja en su mano. “Vine sólo por mis hijos. De lo contrario, ni venía”, comentó Raquel, quien en las últimas semanas mantuvo un escandaloso enfrentamiento mediático con Rosenwasser. Otros familiares, entre ellos su hijo, y amigos cercanos trasladaron el cajón. Justamente el hijo, Balta, habría sido quien les pidió a sus padres que bajaran el tono de su pelea en los medios. No se observó a ninguno de los compañeros que el creador del famoso “¡Rompé Pepe!” conoció en su carrera televisiva.
Al Panteón ingresado por separado. Valeria, en cuyos brazos falleció Leo, vestida de negro y visiblemente conmovida, evitó ingresar con Bermúdez al Panteón. Recién ingresó cuando la ex esposa del humorista ya había salido.
Marcelo Biondi, abogado y amigo de Leo, expresó: “Rehizo su vida. Ahora tenía algunos problemas por su separación, pero estábamos ayudandolo a solucionarlo. Todo seguro derivó en un gran stress que terminó en esto. Igual siempre estaba pum para arriba. Tengo un audio de un mensaje que me mandó el jueves y lo sigo escuchando. Era así, un buen tipo”. En el mensaje que le envió unas horas antes de fallecer, Leo decía: “Estoy bien, loco, remandola. Como todos. Excelente con Valeria. No sabés lo que es Valeria, una mina... Tenemos que tomar un café. Ahora te escribo tranqui, estoy manejando”.