Brian Lanzelotta entró en la casa de Gran Hermano y contó su historia de vida. Más allá de haber nacido en una casa muy humilde, luchando con su hermano enfermo, Brian contó que él sentía que tenía un hijo de ocho años, pero que por la mala relación que tenía con quien era su novia y con la familia de ella, nunca había podido encontrarse con él ni hacerse un estudio de ADN. Lo cierto es que después de mucho pelear logró lo que quería, hacerse el estudio y el resultado fue positivo. Brian es papá.
"Ayer me dieron el resultado, dio positivo, soy papá", dijo emocionado Brian en Intrusos.
Fueron ocho años de una dura batalla en la que Lanzelotta siempre sospechó de la paternidad pero nunca lo dejaron llegar al menor.
“Desde el primer día que me generaron la duda que luché para saber si era mi hijo. El 6 de septiembre nos hicimos el ADN y ahora ya no quedan dudas. Desde ayer que no dejo de temblar. Igual que se queden tranquilos porque no quiero ir contra nadie, no me importa si me ocultaron la paternidad. Ahora lo único que me importa es ver a mi hijo, que él sepa que soy su papá y poder hacerlo feliz. Quiero recuperar estos ocho años en los que no estuvimos juntos”, dijo Brian en Intrusos.
El joven nunca dudó de la paternidad, aunque quien le impidió conocerla antes fue justamente quien era su novia. “Hace ocho años estuve de novio con una chica, pero ella también tenía una relación paralela con quien era mi jefe. Ella se juntó con él y tuvo otra hija con ese señor. Mi novia siempre dijo que mi hijo era de él, pero yo dudaba por un tema de algunas fechas y por eso la busqué para hacer el ADN. Nunca tuve buenas respuestas por parte de quien era mi novia y por eso fui a la Justicia”, comentó Brian.
“Yo intenté siempre hacer las cosas de manera pacífica. La llamé varias veces, pero nunca me atendió”, agregó.
Al final la historia terminó de la mejor manera. Ahora Brian sabe que más allá de su deseo de salir corriendo para ver a su hijo, debe respetar los temas legales.
“Ahora voy a iniciar una causa judicial para darle mi apellido”, contó.
Brian agregó que ya estuvo en contacto con el nene cuando ambos debieron someterse al examen de ADN. "Lo conocí el día en que nos hicimos los análisis. Cuando lo tuve al lado, me puse como un pollito mojado. Lo vi y agaché la mirada", admitió, al tiempo que reveló hacia dónde apunta: "Ahora tengo un solo objetivo, que es hacer feliz a mi hijo".