Uno de los grandes éxitos del año atípico que vivió la TV argentina en 2020 fue sin dudas MasterChef Celebrity. El programa irrumpió en la televisión para llevar alegría a millones de hogares argentinos. Gran parte del increíble éxito que tuvo el ciclo se les debe a los implacables jurados: Damián Betular, Donato De Santis y Germán Martitegui.
Este ultimó mencionado, es de los más temidos y, a la vez, más amados del certamen. Por momentos se mostró muy frío y distante con los participantes, pero con el transcurrir de los programas demostró que sólo era un papel y que es mucho más querible de lo que deja ver.
Recientemente, participó en ‘MasterChef a la carta’, el segmento que encabeza Flor Vigna, y el reconocido chef, ante el pedido de la conductora, revivió parte de su pasado: “No soy nostálgico. La verdad que no reniego de mi pasado, todo lo que hice me gusta, pero estoy en un momento muy hermoso. Me gustaría ir al futuro, si puedo. Estoy con mis hijos y todo el tiempo estoy pensando: qué harán, qué les gustará, a qué se van a dedicar. Yo soy muy de planear”, contó.
"Antes de la paternidad era un obsesivo con las cosas de mi casa. Me gusta mucho el arte y los cuadros, por ejemplo, tenían que estar perfectamente colgados. Ahora los cuadros tienen rayas hechas por los chicos y todos los jarrones están rotos. No me quejo, uno cambia", agregó.
Sus ganas de ser padre vinieron luego de su desempeño en MasterChef Junior. Antes del certamen no tenía afinidad con los niños y debió tener charlas con un psicopedagogo para saber cómo lidiar con los menores de edad en el reality.