El improvisado conductor dijo en su Twitter que no volvería a encabezar la entrega de los premios luego de ser criticado por los sectores más conservadores de Hollywood.
Seth MacFarlane, el irreverente conductor de la entrega de los premios Oscar, indicó a través de Twitter que si bien la pasó muy bien haciendo el trabajo, no volvería a repetir la expriencia.
MacFarlane, que es muy conocido en el medio por sus escatológicas series Padre de Familia, American Dad y The Cleveland Show se ganó el puesto de conductor tras el estreno de su desvergonzada película Ted que incluso tuvo una nominación al Oscar por Mejor Canción Original.
La razón de su renuncia a una nueva conducción del evento se debe a las terribles críticas que cosechó de los sectores más conservadores de Hollywood, de los que el guionista, productor y director no para de burlarse en sus programas y a los que no hizo concesiones en su nueva ocupación.
Entre otras cosas, MacFarlane fue acusado de misógino y xenófobo tras meter a un actor vestido de soldado nazi en el escenario y cantar un tema dedicado a las veces en las que las actrices mostraron sus senos en las películas llamado "Vimos tus tetas". Algunos otros chistes pasados de tono fue uno que decía que "John Wilkes Booth (el asesino del presidente Lincoln) fue el único actor que se pudo meter realmente en la cabeza de Lincoln".
Sin embargo, la audiencia del evento tuvo un considerable aumento de televidentes con respecto a las anteriores ediciones, con lo que Academia logró su objetivo de llegar a una mayor cantidad de espectadores y a una nueva generación de norteamericanos ya que muchos de ellos son de una franja etaria (17 a 35 años) que permanecía ajena al Oscar; con lo cual no es improbable que el próximo año lo vuelvan a convocar a él o a otro exponente de su generación como Kevin Smith o Ben Stiller.
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