El polirrubro Peluffo, que actualmente gana la pantalla de
Utilísima al frente de un magazine hogareño y se ha consolidado como marca registrada en la conducción de diversos reality shows, destaca en este ciclo momentos especiales como "una secuencia donde una de las tribus va a conocer el mar y los llevan a un acuario.
Ellos se paran delante de las peceras y el jefe dice: 'Estos tiene los peces acá para mirarlos y no se los comen'". Otro de los momentos especiales destacados por el animador es aquel donde
"otro de los grupos tribales se sorprende al abrir una canilla y ver que salía agua... Cuando allá en su lugar de origen caminaban 5 km. con un tacho en la cabeza para sacar agua de un charco. ¡Y encima con una perilla sale fría y con la otra caliente..! No lo podían entender".
-En un reality con tantos condimentos, ¿qué lugar elegiste ocupar como bastonero?-Tiene una participación muy justa y muy medida que hace que haya un equilibrio entre lograr que me digan: "Che, vi tu programa" y no quitarles protagonismo a las tribus. Si tuviera que interactuar con ellos sería distinto. Pero acá yo soy el presentador, cuento la historia, la abro, la voy anticipando. Y hasta ahí llego, lo demás se ve. Si mirás al producto como un todo pensás que la mejor manera de que le vaya bien al programa es ésa, no pensar que le va a ir mejor al programa si yo aparezco más.
-¿Este ciclo está dirigido sólo a aquellos que vieron la primera parte? -La gente compró las historias, compró a estas familias. En esta temporada nos va a ir muy bien, el que se enganchó con la primera se va a copar con la segunda. Pero la idea de ver a tipos de una tribu en Buenos Aires puede enganchar a cualquiera que se sume ahora.
-Si hicieron una segunda parte es porque consideraron que la primera rindió en rating. ¿Fue así?-Totalmente. En el ranking de lo más visto del año pasado, sacando eventos excepcionales como la Copa Libertadores y los premios Martín Fierro, según el ranking del anuario de Televisión.com.ar los tres programas más vistos fueron Graduados, ShowMatch y Perdidos en la Tribu. ¡Hicimos podio! Fue una sorpresa para mí.
-¿Cómo fue la despedida de estos grupos ahora que no van a volver a verse?
-Cuando grabamos la primera temporada, las familias sabían de la posibilidad de hacer una segunda temporada y estaba la expectativa de volver a verse. Ahora, la despedida de esta segunda temporada fue muy emotiva. Y es que saben que la posibilidad de volver a verse es mínima. No estamos hablando de destinos habituales como París o Madrid... Estamos hablando de los Hamer de Etiopía, los Mentawai de Indonesia y los Himba de Namibia.
-¿En qué se cambiaron unos y otros después de esta experiencia?-Creo que en muchas cosas. A las familias argentinas, sin dudas, como se vio en la primera temporada, les reacomodó sus prioridades... Lo vimos con las chicas, que se fueron de Argentina pensando si iban a tener buena señal de celular y se encontraron comiendo raíces o haciendo su propia choza... ¡con bosta de vaca! Y allá en Etiopía, como el clima es tan seco, tenían que hacerlo con bosta fresca. Al volver a casa, por ejemplo, cuidaron más el agua, abrían la ducha sólo para mojarse primero y enjuagarse después. Aprendieron que el agua era un recurso valioso. Por el lado de la gente de las tribus, en lugar de llevarse de vuelta la idea de que hay un mundo mejor, se vuelven a sus vidas pensando la idea de que "esta gente está loca".
-¿Cuál es el premio a los ganadores?-En esta segunda temporada no hay premio, el programa está planteado como un intercambio cultural.
Así las cosas, desde esta noche veremos con las familias argentinas Funes, Moreno y Villoslada, ahora serán encargadas de recibir a los visitantes y llevarlos a una cancha de fútbol, o a bailar, presentándoles a los visitantes los rituales de vida de nuestra propia tribu y sometiéndolos a sus miradas asombradas.
"Un raid muy intenso y divertido"En un ciclo sin precedentes en nuestra televisión, se podrá apreciar desde hoy cómo los nativos de Asia y Africa "van a una cancha de fútbol, conocen el mar, o van a bailar, en un raid muy intenso y muy divertido", repasó Peluffo.
Perdidos en la Ciudad complementa a Perdidos en la Tribu, un formato de Eyeworks Cuatro Cabezas que tuvo versiones en Holanda, Bélgica, Alemania, Noruega, Nueva Zelanda, Australia y España y que adquirió distintas modalidades para explayarse. Mariano informó que "hubo programas de algunos países en los que viajaron otras familias y otros en los que se hizo ese viaje pero con famosos, pero aquí elegimos respetar a los mismos protagonistas y hacerlo a la inversa".