Carlos Tévez manifestó este martes que no extraña la práctica profesional del fútbol y si bien no descartó un regreso a la actividad, dejó en claro que sólo lo haría en un club del exterior, en tanto la única condición para volver en la Argentina es la de continuar en Boca Juniors.
El jugador, que se despidió de Boca Juniors a mediados de este año, dejó en claro que por el momento no piensa en volver a ponerse los pantalones cortos aunque no descartó hacerlo -en el exterior- siempre y cuando le ofrezcan una propuesta que lo motive. “Extrañar, no extraño el fútbol. La estoy pasando realmente bien con mi familia”, fue la frase que anticipó su presente.
Su presente como jugador retirado
“No me pasa de querer estar cuando veo que rueda la pelota. El sábado tuve un casamiento mientras Boca jugaba y por dentro pensaba que, si estuviera jugando, me estaría perdiendo el casamiento. Y si se daba el resultado como fue, no iba porque me amargaba y no iba a poder sacarme una foto o tomar una copa; iban a decir que Boca perdió y Tévez estaba de joda. El fútbol te lleva a eso”, ejemplificó el ex 10 de Boca al hablar por el canal de cable ESPN.
"¿Si pienso volver a jugar? Todos mis amigos y familia me hacen esa pregunta, pero no sé para qué lado voy a arrancar. Hoy disfruto del momento. Uno se empieza a preparar. Pero me cuido en el mientras tanto. Quisiera algo que me interese y motive o me saque algo de adentro y me den ganas. Pero como estoy, cada vez que veo a la Juventus, Boca o algún equipo que he pasado, busco adentro mío ese fuego para motivarme para jugar 6 meses o un año más y no lo encuentro”, se sinceró Tevez.
“Si hay futuro como jugador, es afuera. Mantendré mi palabra, no voy a jugar en otro club acá. De afuera me tentaron para ir a jugar, pero por ahora juego con los pibes en el barrio y me entreno para estar bien. Igualmente no me levanto a las 6 de la mañana”, comentó el Apache, descartando de plano la posibilidad de alistarse en All Boys, el club de sus inicios en el fútbol infantil, como se especuló en un momento.
Además, habló sobre los últimos entrenadores que tuvo en sus ciclos en Boca: "Con Guillermo (Barros Schelloto) me equivoqué yo porque el día que jugué el último partido en La Bombonera, en el que a gente grita 'Carlitos no se va' y yo estaba en duda, cuando salgo de la cancha y mi familia me pide que no me vaya. A Guillermo le dije que no me iba. Y cuando llego a mi casa, ya más frío, decidí irme a China. Entre todo el quilombo, me olvidé de avisarle a Guillermo. Y bueno, cuando decidí pegar la vuelta la relación fue totalmente diferente. Me tragué un montón de cosas por el bien del club, por eso no podía mover las piernas".
En cuanto a Gustavo Alfaro, opinó que "no respaldó con actos sus palabras. Dijo una cosa e hizo otra. Si era en otro club, no sabía como terminaba. Boca es mi casa y lo amo, por eso me comí todo para no hacer quilombo en el club".
También se refirió a una situación que tuvo a Mauro Zárate como protagonista indirecto: "Cuando llegó Zarate me dijo que lo traían para reemplazarme a mi. Yo seguí trabajando, cuando me tocaba, jugaba. Pero estoy tranquilo porque dejé mi corazón en Boca. ¿Me pude haber equivocado? Sí, como todo el mundo".
Finalmente, con respecto a su posible candidatura para presidente de Boca, confió: "Todos piensan que voy a ir contra Román, contra esta dirigencia... Si yo voy realmente a la política, no voy a ir ni contra Román, ni contra Bermúdez, Cascini o Delgado. Presentaré un proyecto, no voy a tirar barro".
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