Defensa y Justicia empató 0-0 con Liga de Quito en el estadio Néstor Díaz Pérez de Lanús, en el marco de la vuelta de las semifinales de la Copa Sudamericana. Con la victoria 3-0 en la ida, los ecuatorianos clasificaron a la final del torneo continental.
Era difícil. Era realmente un milagro. Pero Defensa sabe de hazañas, y más en la Copa Sudamericana, por eso es que los corazones verdes y amarillos coparon la cancha de Lanús, creyendo que se podía dar. Lo mereció, con más empuje que fútbol. Pero no se dio. Liga es un equipo serio, que se cargó a varios clubes fuertes, y de la mano de Luis Zubeldía irá por su segundo título.
Tal como se esperaba, Defensa salió a intentar pegar de entrada para achicar la distancia, agrandarse y poner en aprietos al rival. Así, a los cinco minutos tuvo una doble chance clarísima: Cardona cabeceó un córner y la pelota dio en el palo; tras dos rebotes, Togni remató mordido y acarició el poste.
Sin embargo, el Halcón no pudo mantener el ritmo inicial por mucho tiempo más. De contra, Liga de Quito casi liquida la serie a los 16', pero una mala definición de Jhojan Julio mano a mano con Bologna le dio vida al equipo de Vaccari, que tuvo el ímpetu, pero no las formas. No encontró esas triangulaciones por el medio que tanto daño hacen, por lo que atacó por afuera con Togni.
Y si bien el ex Independiente siempre es su mayor arma de peligro, el zurdo suele llegar con ventaja luego de conexiones que le permiten recibir solo y con espacios. No fue el caso: cada vez que la tuvo se encontró de frente a su marcador, y no estuvo preciso con los centros. De todos modos, lo hecho en el primer tiempo ameritaba al menos un gol de Defensa.
El Halcón tuvo dos remates desde lejos de Barbona, el primero fue controlado por Domínguez y el segundo fue enviado al córner por el arquero. De ese envío, Ramos Mingo capturó una carambola y de media vuelta casi la manda a guardar. Pero los goles no se merecen, se hacen.
Y la contundencia que muchas veces se le destacó a los de Florencio Varela esta vez no apareció. Claro, le faltó su goleador: 'Uvita' Fernández, quien se desgarró justo unos días antes del partido de ida y si bien fue al banco en esta ocasión, no sumó minutos.
El segundo tiempo fue desprolijo. Defensa, con cambios ofensivos y jugado en ataque, encontró alguna triangulación aislada pero también se vio presionado por el apuro del correr del reloj y la diferencia en el resultado global. Las más claras las tuvieron Barbona, con un zurdazo que se fue por arriba, y sobre el final Andrés Ríos, quien reventó el travesaño, y Pratto de cabeza, desviado por Domínguez.
Liga de Quito tuvo varias contras que no resolvió bien, un remate desde afuera del área al palo de Paolo Guerrero, y una arremetida individual de Mauricio Martínez, que luego perdió el duelo con Bologna. Y finalmente, con el 3-0 de la ida le alcanzó. Los ecuatorianos, con Luis Zubeldía de DT -perdió la final 2020 con Lanús, justamente ante DYJ-, jugarán la final de la Copa Sudamericana, el próximo 28 de octubre, en Maldonado, Uruguay, y ante Fortaleza.