El Muñeco no quiere que sus rivales le encuentren la vuelta al Millonario. “Este no fue el mejor partido”, reconoció el perfeccionista DT de River que sigue dando pelea en todos los frentes. Contra el Tomba le llegaron más de lo común.

Por el momento River sigue siendo una obra de arte en cuanto a los resultados por todos los frentes locales y el internacional. Es decir, la imparable Banda continúa subida en la cresta de la ola del triunfo. Pero si bien la sonrisa de esta Mona Lisa con pantalones cortos encanta a más de un hincha riverplatense, puertas adentro su pintor, Marcelo Gallardo, se cruza de brazos. "Este no fue el mejor partido", reconoció el perfeccionista Muñeco conforme a medias tras la clasificación a octavos de la Sudamericana ante Godoy Cruz pues teme que a su Millonario le hayan encontrado la vuelta.

Los resultados le siguen dando la mano derecha al puntero River que no se cansa de generarle una sonrisa a los hinchas que, entre las nubes, no paran de aplaudir al nuevo y efectivo equipo. Y mientras por el club de Núñez andan de fiesta, en el resto de las instituciones se queman el bocho para tratar, al menos, de hacerle partido a un conjunto que tiene la mente fuerte, juega al límite y pega con contundencia.

"Nos faltó precisión y recuperación de pelota. Estuvimos bien en la definición. Reconozco que este no fue el mejor partido. Ellos no pudieron meterla, nosotros sí y esa fue la única diferencia", dijo en frío Gallardo con la clasificación a octavos de la Sudamericana en el bolsillo y ahora el GPS indica que habrá que viajar a Paraguay para enfrentar a Libertad.

Además el técnico de River, que constantemente habló con sus ayudantes al ver el juego de su equipo el último miércoles por la noche, acotó: "No me gustó como jugamos, pero cuando pasa eso es bueno ganar", y admitió: "Se habló mucho de que este partido iba a ser un trámite y se vio en la cancha que no era así. Corrimos de más, atrás de la pelota. Eso fue lo que no me gustó".

Es que contra Godoy Cruz el equipo de Gallardo recibió 15 disparos. Hasta ahí es un simple dato, pero el tema es que River venía de recibir 35 tiros en los 6 partidos que jugó por el Torneo de Primera División, promedio de casi 6 por partido. De este modo la incomodidad del Millo se notó porque le llegaron.

Además, cabe destacarse que hasta antes de la postergación del partido contra Arsenal (por el torneo local) no le vino muy bien al Millo ya que le cambió el calendario pues al plantel, tras esa jornada, le iba a llegar una fecha de descanso en una semana larga. El Superclásico se acerca, y al respecto Marcelo Gallardo reconoció: "Creo que Boca mejoró en los últimos partidos. Lo he visto y con la llegada de Arruabarrena ha tenido buenos resultados en poco tiempo".


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