Tras la victoria del domingo en la Bombonera, Cocca tiró una bomba que todavía no se desactivó en la interna de Racing: “vamos a ver si Licha vuelve con Independiente”, pero ayer Lisandro López se entrenó a la par del grupo, dejó atrás el cuadro gripal que lo marginó del clásico ante Boca y está al pie del cañón esperando la decisión del técnico, que ahora debe resolver si Enrique Triverio o el capitán de la Academia, será el compañero de fórmula de ataque de Lautaro Martínez el sábado (a las 21.30, en el Cilindro), ante el Rojo.
Cocca fue contundente el domingo: “La verdad es que me gustó mucho el equipo. No me alejo del pensamiento de que siempre voy a tomar decisiones que sean lo mejor para el plantel, y si en la semana decidimos que Licha no va a estar, no estará. Y si en la semana Licha está bien, estará en el clásico”.
Y frente a ese escenario, el capitán arrancó ayer la semana sin dar ventajas, entrenó exigiéndose en los movimientos con pelota, y dejó en claro que si lo borran del once titular, esta vez no será de un tema físico, como ocurrió con Boca.
Lo que está claro ahora es que el máximo referente del plantel de Racing tendrá que pelear por un lugar en la delantera académica con Enrique Triverio, de buena actuación en el encuentro ante Boca, para acompañar a Lautaro Martínez. El resto del equipo será el mismo el mismo que ganó en la Bombonera.
En la actividad de ayer, los futbolistas que fueron titulares el domingo realizaron tareas regenerativas en el gimnasio del club, mientras que el resto del plantel se movió en la cancha auxiliar del Cilindro de Avellaneda.
Los jugadores de la Academia comenzaron con un circuito de técnica individual con énfasis en el pase y luego llevaron a cabo un ejercicio de fútbol en espacios reducidos, con un trabajo de siete contra siete con arcos grandes. Y los lesionados, Iván Pillud (molestia en el músculo oblicuo del abdomen) y Lucas Orban (dolencia en el tendón) trabajaron aparte.
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