El consumo en los supermercados de la Ciudad de Buenos Aires registró en el primer trimestre una fuerte caída del 15,7% en comparación con igual período del año pasado, según informe oficial.
De acuerdo con un relevamiento de la Dirección General de Estadística y Censo del Gobierno porteño, la venta de alimentos registró una ligera suba del 0,3% en la comparación interanual.
En este sector, el más sensible para las capas sociales de menores recursos, los cuatro trimestres del año pasado experimentaron caídas en comparación con 2015.
En los últimos tres meses del año pasado, las ventas de alimentos en supermercados porteños experimentaron una caída del 6,1% contra igual período del 2015.
El estancamiento que todavía demuestra el consumo en todos los rubros es uno factores que más está afectando el despegue económico que espera el gobierno.
El sondeo del gobierno de la Ciudad se basa en los resultados de los indicadores de ventas basados en información fiscal correspondientes al primer trimestre de 2017.
Estos indicadores se construyen a partir de la información consolidada obtenida de las declaraciones juradas impositivas del Impuesto sobre los Ingresos Brutos, que tiene correspondencia con las ventas, según explicó la Dirección de Estadística y Censo.
Según esta medición, las ventas en los restaurantes registraron entre enero y marzo una caída del 1,8% contra los mismos meses de 2016, mientras que en los establecimientos de comidas rápidas se verificó un repunte del 5,5%, después de tres trimestres con importantes bajas.
La comercialización de electrodomésticos también tuvo en el primer trimestre un buen resultado, con un incremento del 3,8%, luego de varios períodos con fuertes caídas.
En el rubro telefonía móvil, las ventas experimentaron una baja del 2,2% en la medición interanual del primer trimestre mientras que en las jugueterías hubo un incremento del 4,3%.
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