Un audio de una entrevista inédita a Omar Chabán del día de la inauguración para la prensa del boliche República de Cromañón revela que el empresario ya había tenido inconvenientes con bengalas y bombas de estruendo.
En el archivo que difundió la publicación digital Soy Rock , Chabán cuenta que en un recital realizado en el mismo local vivió una situación con el público y los fuegos de artificio: "La semana pasada tuve problemas con bombas de estruendo. Tiraban bengalas, que es muy peligroso. Puede haber un incendio, cosas así".
El diálogo con el periodista fue en el marco de la apertura del local bailable en abril de 2004 y, en el mismo, asegura que tiene capacidad "a tope para 5.000 personas".
Meses después y luego de la tragedia se descubrió que el límite permitido era de 1.031, por lo que el dueño quintuplicó el número.
"Lo vine a ver y me pareció muy bueno, me pareció que daba justo para los recitales y justo se daba la conclusión de que me cuesta conseguir determinadas bandas que dicen que Cemento les queda chico", remarca.
La idea de Chabán con el espacio era darle un uso como teatro durante la semana y también para la presentación de DJ´S que animen festivales de música electrónica.
"Bandas internacionales punk las tengo prohibidas en Cemento y acá también", resaltaba.
Por último, en su relato acerca de las comodidades que brindaba Cromañón, relató: "La semana pasada estaban los chicos de Callejeros. Bajaron y fueron al restaurant".