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Un grupo de 200 vendedores se enfrentó con la Policía Metropolitana. Un oficial terminó herido y uno de los manifestantes, detenido. Los locales bajaron sus persianas
Una persona fue detenida este mediodía y un efectivo policial sufrió heridas leves en medio de un enfrentamiento de la fuerza de seguridad con vendedores ambulantes en el barrio porteño de Flores.
Un fuerte despliegue de la Policía Federal, con más de 300 efectivos, intentaba impedir que los vendedores se ubiquen sobre las veredas de la avenida Avellaneda, entre Nazca y Cuenca, dado que no cuentan con permiso ni facturación.
Hubo corridas y máxima tensión en horas de la mañana cuando los efectivos de la Policía Federal avanzaron en bloque contra los manifestantes, que para resistir arrojaron piedras sobre el operativo.
Este martes fue el segundo día consecutivo del operativo de seguridad que busca erradicar el comercio ilegal de productos en las calles del barrio de Flores, tras las denuncias de los comerciantes por competencia desleal.
Al menos 2.000 vendedores se ubican de lunes a sábados sobre ambas veredas de la Avenida Avellaneda en las calles aledañas como Nazca, Argerich, Helguera, Cuenca, Campana, Concordia, Bogotá, Bacacay y Aranguren.
El lunes, unos 500 efectivos de la Policía Federal y Metropolitana realizaron un operativo en la misma zona para impedir la instalación de manteros, pero los comerciantes acusados de "ilegales" volvieron el martes para resistir.
Los comerciantes realizaron una manifestación y desplegaron una bandera sobre la avenida, que quedó totalmente cortada a la altura de la calle Cuenca, con la consigna: "Queremos trabajar, pedimos una solución".
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