Un terrorífico caso sacude a toda España: en Getafe, Madrid, un hombre asesinó a sus hijos, incendió su casa y se suicidó arrojándose a las vías del tren, dejando antes una carta en la que confesó su atroz crimen.
Según los investigadores, el filicida, de 46 años e identificado como José Alberto Gálvez López, ahogó en la bañera de su casa a sus niños, un varón de 13 (con una discapacidad que lo obligaba a moverse en silla de ruedas) y una nena de 8. Luego, recostó sus cuerpos ya sin vida en la cama matrimonial de su habitación, prendió fuego el domicilio y se fue. Un rato después, se suicidó arrojándose a las vías del tren de la estación Getafe Industrial, a unos kilómetros de su vivienda.
El macabro caso salió a la luz luego de que vecinos le avisaran a la madre de los niños que su departamento estaba incendiándose. Cuando los bomberos ingresaron, hallaron los cadáveres calcinados. Minutos después, las autoridades recibieron un aviso de que un hombre se había arrojado a las vías del tren: era el padre de los nenes.
Tras los hechos, la mujer tuvo que ser trasladada de urgencia al Ayuntamiento de Getafe, en plena crisis de ansiedad. En la requisa de la vivienda, los investigadores encontraron una escueta carta, escrita por Gálvez López.
"He sido yo. He matado a mis hijos. No quiero que sufran", rezaba el breve texto de la misiva.
Según trascendió horas después en los medios españoles, los padres de los niños asesinados se encontraban en un proceso de separación, aunque no existían denuncias por malos tratos ni nada por el estilo. Gálvez López tampoco tenía antecedentes de ningún tipo.
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