Los causantes de la masacre,
en la que murieron 12 personas, se hicieron con un vehículo el viernes por la mañana en la localidad de
Montagny Sainte Felicite, unos 50 kilómetros (30 millas) al nordeste de París, y fueron avistados y denunciados a la policía.
De esta manera,
se produjo una persecución que se extendió a la localidad de
Dammartin-en-Goele, en la que miles de agentes de las fuerzas especiales francesas se movilizaron para acorralar a los agresores.Por otra parte, en el supermercado
"Hyper Cacher", que figura entre los establecimientos que dispensan productos dirigidos a la comunidad judía, se perpetró un nuevo ataque, cerca de las 10 de nuestro país, y allí hubo, en principio,
dos muertos. Antes de la toma de rehenes, el sospechoso se dirigió a los policías para decirles:
"Ya saben quién soy", en aparente alusión a
su acción de ayer en Montrouge, sur de París, donde falleció la agente municipal.
Entre los rehenes capturados en el comercio "Hyper Cacher", informó la televisión
BFMTV, se encuentran varias mujeres y niños. Un testigo de los hechos, Christian Pessey, dijo a ese mismo canal haber "escuchado el primer disparo muy cerca", y a continuación vio "a gente corriendo por la calle y gritando". Tras ese primer disparo, el testigo escuchó una nueva ráfaga.
Finalmente, la policía confirmó el asesinato del sospechoso.
Toma de rehenesAl menos cuatro personas murieron, entre ellas el atacante, tras la entrada de la policía a una
tienda kosher en la que el hombre tomó a rehenes, informaron el viernes dos funcionarios de la policía.
Las fuerzas de seguridad tomaron por asalto la tienda pocos minutos después de que otro grupo entrara por la fuerza al edificio donde se habían refugiado dos hermanos sospechosos de cometer la matanza en el semanario Charlie Hebdo.
Los dos funcionarios que solicitaron el anonimato confirmaron que el atacante, identificado como Amedy Coulibaly, murió, uno de ellos informó que tres rehenes murieron.
Ninguno de los funcionarios pudo informar qué sucedió con la mujer que un boletín de la policía identificó como cómplice.
Las autoridades ordenaron el cierre de todas las tiendas en un famoso barrio judío en el centro de París, lejos de los incidentes que se desarrollan en la imprenta cerca del aeropuerto y en el mercado de comida kosher en el este de la capital francesa.
La oficina del alcalde de París anunció el viernes el cierre de los negocios a lo largo de la calle Rosiers en el barrio parisino de Marais, en el corazón del distrito turístico y aproximadamente a un kilómetro de distancia de las oficinas del semanario Charlie Hebdo.
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