Cuando un delincuente comete un delito grave es normal que pague con prisión. Hasta ahora muchos presos se veían favorecidos con el beneficio de la excarcelación que debería otorgarse a personas que no signifiquen ‘un riesgo para la sociedad ‘. Sin embargo, se comprobó que muchos recuperaban la libertad y volvían a delinquir. El tema es complejo ya que existen muchas causas para analizar, empezando por la falta de control y seguimiento del ‘ex preso’ cuando se inserta en la sociedad. Sería necesario que la fiscalía que investigue en profundidad y un sistema judicial eficiente sin corrupción policial ni de jueces. Además, sería útil contar con una sociedad sin marginalidad ni pobreza, con mayor contención familiar a los menores y sin tanta distribución desigual de la riqueza por parte de políticos corruptos que se llenan los bolsillos de coimas y negocios ilegales como la droga. Finalmente, la sociedad entera estaba reclamando a gritos que el sentenciado cumpliera el tiempo establecido sin adelantar la salida y no beneficiarse con quita de pena, 2x1, o excarcelación, ya que por algo fueron condenados. El año pasado se aprobó la ley que limita las excarcelaciones a condenados por trata y violadores. Es el comienzo de algo que deja mucho por hacer.
Mabel Amen
DNI 16.231.837