Permaneció desaparecido durante unas 20 horas en La Pampa.
GENERAL PICO, La Pampa.- Un efectivo de la Policía de La Pampa permaneció desaparecido durante unas 20 horas y, tras ser localizado por una patrulla en un campo de las afueras de General Pico, aseguró haber sido capturado por “dos seres pequeños, con ojos rojos, que le daban órdenes telepáticamente”.
El cabo de la División Abigeato, identificado como Sergio Pucheta, fue encontrado por varios uniformados a 20 kilómetros del lugar en el que había dejado su moto, una zona en la que los lugareños habitualmente perciben “luces extrañas”, que vinculan a manifestaciones del fenómeno OVNI.
El protagonista de la insólita historia, un cabo de 28 años, desapareció durante la noche del jueves mientras patrullaba la zona rural de Dorila. Finalmente, fue hallado durante la tarde del viernes “entumecido y en posición fetal”, a más de 20 kilómetros de ese lugar, entre las localidades de Trilí y Quemú Quemú.
Pidió apoyo a la fuerza
Todo comenzó el jueves por la noche cuando el joven uniformado conducía una moto, de 125 cc, por los caminos vecinales de Dorila. Pero una hora después de su partida solicitó apoyo a través de su teléfono celular. Estaba en un lugar cercano a la estancia La Barrancosa. Ese fue el último contacto mantenido por el cabo con otros efectivos de la fuerza, ya que unos 15 minutos más tarde, al arribar un patrullero de General Pico, sólo se encontraron la motocicleta y otras pertenencias de Pucheta como su arma reglamentaria -desarmada en tres partes, su casco, un handy, y el teléfono celular con el que previamente había solicitado apoyo. Inmediatamente varias patrullas iniciaron un intenso rastrillaje por la región, que terminó a las 16.30 del viernes, cuando un baqueano encontró al policía desaparecido. Se encontraba acostado sobre una cuneta, a unos 20 kilómetros del lugar donde fueron halladas sus pertenencias, visiblemente conmocionado. El estanciero se comunicó rápidamente con la Policía. Voceros policiales indicaron que el joven se encontraba “bien de salud, sin signos de haber sufrido violencia, pero medio desorbitado”, sin poder responder con claridad lo que le había sucedido. De acuerdo lo publicado por varios diarios pampeanos, el policía dijo que fue “contactado por dos seres de baja estatura, con ojos color rojo, que le daban órdenes sin dirigirle la palabra, telepáticamente”. La extraña versión también daba cuenta de que el efectivo intentó huir de sus perseguidores, pero finalmente no pudo explicar cómo llegó al lugar donde fue encontrado.
Pidió apoyo a la fuerza
Todo comenzó el jueves por la noche cuando el joven uniformado conducía una moto, de 125 cc, por los caminos vecinales de Dorila. Pero una hora después de su partida solicitó apoyo a través de su teléfono celular. Estaba en un lugar cercano a la estancia La Barrancosa. Ese fue el último contacto mantenido por el cabo con otros efectivos de la fuerza, ya que unos 15 minutos más tarde, al arribar un patrullero de General Pico, sólo se encontraron la motocicleta y otras pertenencias de Pucheta como su arma reglamentaria -desarmada en tres partes, su casco, un handy, y el teléfono celular con el que previamente había solicitado apoyo. Inmediatamente varias patrullas iniciaron un intenso rastrillaje por la región, que terminó a las 16.30 del viernes, cuando un baqueano encontró al policía desaparecido. Se encontraba acostado sobre una cuneta, a unos 20 kilómetros del lugar donde fueron halladas sus pertenencias, visiblemente conmocionado. El estanciero se comunicó rápidamente con la Policía. Voceros policiales indicaron que el joven se encontraba “bien de salud, sin signos de haber sufrido violencia, pero medio desorbitado”, sin poder responder con claridad lo que le había sucedido. De acuerdo lo publicado por varios diarios pampeanos, el policía dijo que fue “contactado por dos seres de baja estatura, con ojos color rojo, que le daban órdenes sin dirigirle la palabra, telepáticamente”. La extraña versión también daba cuenta de que el efectivo intentó huir de sus perseguidores, pero finalmente no pudo explicar cómo llegó al lugar donde fue encontrado.
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