Adrián Napolitano estuvo con el juez a cargo de la investigación sobre el ataque a los jugadores de River en La Bombonera, ocurrido el último jueves.
En la tarde de ayer, el "Panadero" entró por el estacionamiento con una camioneta blanca, vidrios polarizados, sin llamar la atención de la prensa. El encuentro duró 20 minutos, y él firmó una eximición de prisión.
Todavía se desconoce la situación de las otras tres personas por quienes la fiscal Susana Calleja pidió indagatoria.
Napolitano se mueve con custodia. Después de recibir amenazas en su casa, su panadería y llamados de extorción a su esposa, la Justicia le dispuso de seguridad personal. El problema es que un sector de hinchas de Boca —se cree que son barras—, enfadados por la acción de Napolitano que los dejó afuera de la Copa Libertadores, quiere atacar al "Panadero" y pedirle explicaciones sobre su accionar.
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