Un grupo de vecinos de Lomas de Mariló, en Moreno, dicen "basta" ante la ola de asaltos que vienen sufriendo. La muerte del trabajador Luis Eduardo Toloza colmó la paciencia y hoy se movilizan para exigir medidas.

Indignación e impotencia es lo que se percibe en Lomas de Mariló, en la localidad de Moreno, agobiada por la inseguridad como tantos barrios del Conurbano, pero movilizada de manera inusual desde el viernes en cuya madrugada un grupo de asaltantes mató en su domicilio a Luis Eduardo Toloza. Un crimen que ha puesto en estado de movilización a todo el barrio en demanda de ‘justicia y seguridad’.

La inseguridad es moneda corriente en el barrio, ante la indolencia de las autoridades policiales y municipales, incapaces estas últimas de atender los mínimos requerimientos de los vecinos en materia por ejemplo de iluminación. Todas las casas de la calle Segundo Sombra, entre avenida Roca y Díaz Vélez han sufrido en los últimos meses el ingreso, o intento de ingreso a sus domicilios, y los asaltos a los transeúntes son moneda corriente. Pero lo de la madrugada del viernes pasado fue claramente peor.

Los vecinos resolvieron organizarse para colocar por su cuenta una alarma vecinal, podar árboles y poner luces.

Un grupo, que los testigos estiman en cinco jóvenes delincuentes, intentó ingresar en la casa de Luis Eduardo Toloza, de 38 años, ubicada en la esquina de Segundo Sombra y Díaz Vélez. Alrededor de las 5 menos cuarto de la madrugada, un sujeto accedió a la parte superior de la vivienda, mientras otros dos intentaban forzar una ventana de la planta baja con un crique. Alertadas por los ruidos, una de las pequeñas hijas de la víctima se asomó y alcanzó a decirle a su hermana: ‘No es papá; están queriendo entrar’. Ante los ruidos y las voces de sus hijas, el dueño de casa se levantó y al asomarse vio a quien sería su asesino; según contó a DIARIO POPULAR su esposa y alcanzó a gritarle: ‘¡No, con mi familia no te vas a meter!’

Fueron tres los disparos, uno certero en el pecho, los que hizo el asesino, un joven de 16 años de nombre Cristian, conocido como ‘Pucho’, que según cuentan los vecinos ya tiene seis víctimas fatales en su haber, pese a lo cual ‘entra y sale de la cárcel’. ‘Ya estuvo en el Correccional de La Plata, pero se escapó de ahí’, contó a este medio Eva Haydeé Gómez, la desconsolada madre de la víctima, que fue prestamente auxiliada por su esposa y vecinos, que alcanzaron a ver a los delincuentes salir huyendo del lugar. Se llevaban como botín una desmalezadora. A partir de la descripción de los testigos, tres delincuentes fueron detenidos -otros dos actuaban de campana y siguen en libertad-.

El sábado la versión circulante en el barrio indicaba que habían sido liberados, lo que llevó a los indignados vecinos a cortar la avenida Roca. El móvil de uno de los canales de televisión que acudió a cubrir la protesta no pudo atravesar el vallado policial, por orden de las autoridades municipales, según contaron vecinos a este medio. Ese mismo día personal de Gendarmería custodiaba a pocas cuadras el domicilio de Cristian, alias ‘Pucho’, el joven que ya tendría 6 muertos en su frondoso legajo, entre ellos un miembro de la Policía Local.

Trabajador gastronómico desde los 13 años, Toloza dejó a su esposa Corina y tres hijos de 1, 6 y 10 años. Muy querido en el barrio donde vivió hasta su prematura muerte, los vecinos se autoconvocaron el domingo en una asamblea en la casa paterna de la víctima, dispuestos a decir ‘basta’. Por eso realizarán hoy martes una marcha a la comisaría 2ª de Moreno, ubicada cerca del Cruce Castelar, para reclamar ‘justicia por Luis y seguridad para el barrio’. Temen que el autor esté pronto otra vez en la calle, asolando al barrio como viene haciéndolo desde hace tiempo. De hecho, ya había robado en la casa de su víctima fatal hace apenas dos meses, contaron familiares de Toloza.

Fueron tres los disparos, unocertero en el pecho, los que hizo el asesino, un joven de 16 años de nombre Cristian.

El reclamo es también contra las autoridades municipales, que no atienden los pedidos más mínimos de los habitantes del barrio. ‘Ni hablar de asfaltar la calle, pero ni siquiera se encargan de la iluminación.

“Esto a la mañana temprano cuando la gente va a trabajar es una boca de lobo”, señaló una vecina indignada. De hecho, en este diario se han publicado reiteradamente cartas vecinos de esa cuadra reclamando por una luminaria que no funciona y jamás las autoridades municipales de Moreno se han hecho eco del reclamo. Así las cosas, los vecinos resolvieron organizarse para colocar por su cuenta una alarma vecinal, encargarse de podar árboles y poner luces, ‘porque si esperamos que lo haga la municipalidad, nos van a matar antes a todos’. Un vecino se comprometió a imprimir el rostro del asesino para pegar carteles, de modo tal que todos lo conozcan y estén atentos, habida cuenta de que es menor y van a liberarlo más temprano que tarde.

‘La madre se encarga de sacarlo cada vez que cae, argumentando que es menor. Tiene otro hermano que está preso, porque es mayor’, detalló un vecino que asegura que en el barrio donde vive ‘Pucho’ los vecinos están aterrados pues ‘acá ya nos robó a todos’.

También resolvieron armar un grupo de WhatsApp para alertar sobre movimientos extraños en el barrio. La primera noche la experiencia fue muy buena en cuanto a la reacción vecinal, pero no así la respuesta de las autoridades policiales, que demoraron una hora en mandar un móvil ante la presencia de cinco jóvenes sospechosos. Para entonces ya había ido un grupo de vecinos a ‘echar’ por su cuenta al grupo. ‘Vamos a continuar, esto no va a quedar así. Que no haya más víctimas como Luis en el barrio’, reclamó ante DIARIO POPULAR Eva Haydée Gómez, con los ojos hinchados de tanto llorar.

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