En un fallo polémico, la justicia neuquina habilitó a un régimen de salidas laborales para un hombre que fue condenado a 30 años de prisión por abusar un niño de tres años que luego falleció por una infección.
Se trata de Carlos Bernardo Soñé, de 43 años condenado a la pena más alta en la historia de la provincia tras recibir 30 años de cárcel.
El caso se volvió uno de los más reconocidos y dolorosos de Cutral Co. Todo se remonta al 1 de noviembre de 2002 cuando el acusado vivía con su pareja, Patricia Alonso y sus dos hijos menores. Uno de los niños, Franco, murió de una peritonitis a los 3 años de edad. Cuando lo llevaron al hospital comprobaron que había sido violado y recibido varias heridas. Aunque se plantó la sospecha que la peritonitis fue producto de un golpe, también ocasionado por Soñé.
Secuestraron al dueño de la fábrica de alfajores Capitán del Espacio
Al condenado le habían realizado diversas pericias psiquiátricas y determinaron que se trataba de un “psicópata perverso”, pero igualmente recibió un particular régimen de salidas otorgado por los jueces del Tribunal de Impugnación Federico Sommer, Liliana Deiub y Héctor Rimaro.
El régimen de “semilibertad” consta de dos veces por mes, 12 horas cada vez. Como la provincia no tiene pulsera electrónica, Soñé es acompañado por un policia.
Por último, cabe destacar que Integrantes del grupo “Justicia por Franquito” se organizaran para viajar la semana próxima a Neuquén a manifestarse contra el polémico fallo.
comentar