Un amenazador mensaje en la red social Twitter motivó que Horacio Rosatti, titular de la Corte de Suprema de Justicia de la Nación, solicitase reforzar la seguridad de los jueces que integran el tribunal que está juzgando a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
En su tuit -en el que arrobó a La Cámpora- el usuario @kike_MPD arengó: "Hay que difundir los domicilios de estos jueces y fiscales de este pelorron (sic) de fusilamiento, si no se ataca con el mismo calibre no se puede".
El tenor del mensaje, que alude a una frase de Cristina Fernández de Kirchner, sumado a los incidentes que se produjeron frente al domicilio de la ex mandataria -ubicado en el porteño barrio de la Recoleta- llevó a que el presidente del máximo tribunal del país dispusiera que se intensifique la seguridad de los magistrados Rodrigo Giménez Uriburu, Jorge Gorini y Andrés Basso.
En el caso del fiscal Diego Luciani, su custodia ya había sido reforzada después de que trascendieran las fotos en las que se lo ve como jugador de un equipo de fútbol que también integraba Giménez Uriburu, y que participaba en un certamen de aficionados en las canchas de la quinta Los Abrojos, cuyo propietario es el ex presidente Mauricio Macri.
En ese momento, fue la Procuración General de la Nación la que solicitó el refuerzo de la seguridad, pedido que fundamentó en la "mayor exposición mediática" que había pasado a tener Luciani.
Cabe recordar que los jueces del tribunal oral federal disponen de custodia desde la muerte del fiscal Alberto Nisman. Ante la inquietud que generaron en esferas judiciales algunos mensajes en Twitter, la Corte resolvió pedir un refuerzo de las custodias.
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