Los docentes universitarios arrancaron su tercera semana de paro, pero el conflicto lleva mucho más tiempo. Las negociaciones por paritarias llevan más de tres meses y todavía no hay resolución. En el medio, 57 universidades continúan con el reclamo por el aumento salarial con diferentes acciones. Abrazos a instituciones, clases públicas y cese de actividades. En el medio hay instituciones que se encuentran con un grave problema presupuestario.
A cien años de la reforma universitaria, los docentes de las instituciones públicas están en pleno reclamo. La última reunión entre el Ministerio de Educación y los gremios docentes se realizó el lunes 13 de agosto. Ocurrió después de tres meses sin juntarse. La cartera que dirige Alejandro Finocchiaro ofreció un 15% en tres cuotas. Hasta el momento solo aumentó (unilateralmente) un 5% pasado, pero que no se acerca al número que piden los sindicatos.
"El propio presidente Macri ha dicho que la inflación era de un 30%", sostuvo Carlos De Feo, Secretario General de CONADU a POPULAR. A raíz de esto, los docentes universitarios mantienen jornadas de luchas. Clases públicas, abrazos a universidades y paros activos son algunas de los métodos de lucha que llevan adelante. Incluso, de no llegar a un acuerdo ya preparan una movilización federal al Palacio Pizzurno para el 30 de agosto.
Más allá del reclamo salarial, el temor sobre la actualidad de la universidad pública radica en el estado de algunas instituciones y en el futuro presupuestario. "Es un tema mucho más importante que el problema salarial. En diferentes universidades vemos que se está ajustando cada vez más", añadió Di Feo. En ese contexto, las comunidades educativas de las universidades salieron a respaldar a cada una de sus instituciones.
Ante esta situación, las universidades chicas son las que más sufren el ahogo presupuestario. "La de Comahue, varias del interior como la de Tucumán, la del Rosario. La situación es muy complicada", añadió el dirigente de CONADU. Por ejemplo, el 14 de agosto se realizó un abrazo simbólico frente a la Universidad Nacional Arturo Jauretche.
Esa institución del Sur del Conurbano está en complicaciones porque, por ejemplo, 140 docentes no cobraron el segundo cuatrimestre de 2017, el gobierno nacional adeuda los salarios 2018 del Plan Fines y, para este año recibió un 63% menos de inversión por estudiantes que la media nacional. Asimismo, existe un atraso en las cuotas que están destinados a gastos para el funcionamiento de las universidades.
Eso es utilizado para el pago de la luz hasta los insumos para el laboratorio. Universidades con cierta tradición pueden afrontar esto a través de modificaciones en el uso de las partidas presupuestarias. Sin embargo, para instituciones nuevas y más chicas eso se convierte ven un problema significativo.
Al respecto, Di Feo indicó: "Esto es una decisión de recortar el presupuesto y achicar la universidad. Está reprimarizando la economía. No le sirve la universidad que trabaja que estudia. Empiezan a recortar recursos y eso afecta a las universidades del conurbano o lugares alejados. Con esta situación económica están destinadas a desaparecer".
comentar