Quilmeño |
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Dos delincuentes ingresaron en su comercio y, de esa manera, logró evitar que lo asaltaran
Ceferino, un almacenero de Barrio Marítimo, echó a trompadas a dos delincuentes que ingresaron en su comercio y, de esa manera, logró evitar que lo asaltaran. El hecho ocurrió alrededor de las 22:30 horas en un local ubicado en la calle 52, entre 128 y 129, en Berazategui.
A poco de finalizar la jornada laboral, Ceferino y Yamila (padre e hija) fueron sorprendidos por un delincuente que se abalanzó para robarles. El ladrón parecía portar un arma, aunque las dos víctimas no llegaron a verla en ningún momento.
Al advertir que era un robo, Ceferino repelió el ataque con golpes e hizo caer al ladrón, quien sufrió un corte en su cara.
Un cómplice del malviviente, que vestía remera negra y llevaba una gorra, pareció arrepentirse del hecho que estaba cometiendo y separó al joven, llevándoselo hacia afuera, donde los esperaba un tercer cómplice con el que, finalmente, huyeron.
Respecto de lo ocurrido, la hija del valiente comerciante detalló: “El que ataca a mi papá estaba muy alterado. Creemos que tenía un arma pero no llegamos a verla. El otro (el de remera negra) estaba más calmado”.
Asimismo, la mujer describió que en la zona no habían tenido problemas de inseguridad hasta este episodio.
“En el comercio es la primera vez que pasa algo así. Somos una familia conocida en el barrio y nunca tuvimos problemas. Somos una familia de trabajadores”, agregó Yamila, que, por último, señaló que ambos delincuentes se fueron del lugar en un automóvil. Un tercer joven, que estaría haciendo de “campana” afuera del almacén, se subió a un automóvil y escaparon a toda velocidad.
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