El elenco que conduce Guillermo Barros Schelotto derrotó a Banfield con un gol de Silvio Romero, y la satisfacción continúa. “Estoy muy contento porque se pudo ganar un partido que moviliza mucho”, sostuvo el artillero.
La alegría continúa en Lanús. La mínima diferencia que el equipo que conduce Guillermo Barros Schelotto le sacó a Banfield permitió que el Clásico del Sur se vista, una vez más y por tercera ocasión consecutiva, de granate. Y tanto en el plantel como entre los hinchas la satisfacción es total, no sólo por el halago construido bajo una lluvia torrencial, sino también por lo que se vislumbra en el campeonato, ya que la distancia con la cima quedó a tres unidades de diferencia, si bien es cierto que al líder River le resta un compromiso porque debe el cotejo con Arsenal que fue suspendido en la noche del domingo.
Unas horas antes, y a un puñado de cuadras de Sarandí, en plena Fortaleza de Guidi y Arias, el dueño de casa se adueñaba del duelo más importante del semestre, y los protagonistas evidenciaron su felicidad. Por caso, el que tomó la palabra fue Silvio Romero, el autor del tanto que determinó el resultado definitivo. Y fue elocuente: "Estoy muy contento porque se pudo ganar este partido especial, que moviliza mucho. Hay que disfrutar al máximo de esta posibilidad"
El delantero, que venía de convertir un doblete para derrotar a Racing, en Avellaneda, esta vez se despachó con una unidad, algo que alcanzó para superar el escollo y que el club que integra tenga en sus manos la gloria del desafío barrial. "Es una muy linda sensación marcar un gol, y más todavía en un clásico. En mi caso es la primera vez y la realidad es que es una alegría inmensa", afirmó.
Lluvia
A la hora de analizar los 90 minutos, el Chino fue certero y aclaró que "se trató del trámite de todo clásico", circunstancia profundizada, según su visión, por las condiciones del campo de juego. "La lluvia hizo más especial el desarrollo. Fue todo muy trabado pero, por suerte, conseguimos la ventaja y nos quedamos con los tres puntos", añadió.
A su vez, valoró el aporte de cada uno de sus compañeros al sostener que "este tipo de compromisos se juegan con firmeza, aguerridos". "Dejamos todo en el terreno, no dimos ninguna pelota por perdida, y si bien pasamos algunos sofocones, ganamos, que es lo importante", indicó. Y remarcó: "los clásicos son así, hay que ganarlos".
Por último, Romero no se olvidó de dedicar la victoria a los simpatizantes granates. "Les regalamos este triunfo a los hinchas. Nos apoyan en todo momento y tienen que disfrutar de estas alegrías", simplificó.