Nacido en la ciudad de Oberá, Misiones, Fischer se radicó en Monte Grande
en 1966, donde actualmente reside junto a su familia compuesta por su esposa, Elena Schmidt, y sus cuatro hijos: Federico, Erika, Helena y Guillermo.
Desde muy joven,
Rodolfo José "Lobo" Fischer, demostró gran interés por el fútbol, tuvo su debut en primera división con San Lorenzo, y se transformó en uno de los máximos goleadores en la historia del club. Quienes lo vieron jugar, aún hoy recuerdan su fuerza y velocidad que lo hacían imparable en la cancha y su recurso distintivo: la recordada maniobra llamada
"bicicleta".
Fischer inculcó y transmitió a sus hijos su gran pasión por el deporte y la importancia del entrenamiento, la dedicación, la perseverancia, el trabajo y el esfuerzo para triunfar en la vida y alcanzar los sueños. Sus amigos y afectos cercanos destacan su permanente esfuerzo y trabajo para mejorar su técnica, lo que lo llevó a convertirse en
un ejemplo para lo más jóvenes.
El intendente Fernando Gray participó de la ceremonia y reconoció la
destacada trayectoria que Fischer logró en el ámbito deportivo: "En el año del Centenario de Esteban Echeverría, a través de la Comisión del Centenario, continuamos designando vecinos ilustres del partido, figuras destacadas de la cultura, la ciencia, el arte y, en este caso, del deporte. El distrito tenía una
asignatura pendiente con Rodolfo, porque es uno de los más grandes deportistas que hemos tenido y nos ha dado muchas satisfacciones con su trabajo. Tenemos que destacar que cuando se reconoce a un vecino ilustre, no sólo se está destacando su labor profesional sino también sus valores humanos, esa combinación es la que resaltamos".
Además, el jefe comunal compartió con los presentes el trabajo realizado por el municipio en el área de Deporte, que nuclea a más de 5.000 niños en escuelas de fútbol en las cinco localidades.