Sorprendiendo a propios y extraños, el potrillo Zodiacal (Cityscape) se quedó con el Gran Premio Jockey Club (G1-2000 metros), el segundo eslabón de la Triple Corona del turf argentino, doblegando en potente atropellada a Irwin (Seek Again), el vencedor de la Polla de Potrillos (G1-1600 metros), que se quedó sin la posibilidad de consagrarse como triple coronado.
El pupilo de Osvaldo Dávila, uno de los menos jugados del nutrido lote de competidores, vino en medio del lote por el lado interior de la cancha, mientras Vespaciano (Daniel Boone), que esta vez, extrañamente, corrió en el fuego cuando habitualmente accionaba de menor a mayor, se alternaba en la delantera con su compañero de yunta Kodiak Boy (Treasure Beach).
En los 450, cuando Irwin se le había puesto cerca al crédito de Las Monjitas, Luciano Cabrera, jinete del ganador, sacó afuera de todo a su conducido y lo hizo atropellar con tanta fuerza que a 200 metros del disco pasó de largo exhibiendo una gran superioridad que se tradujo en un remate violento de 22"20/100 para los 400 finales. En la línea de sentencia, el potrillo del stud Los Dago puso tres cuerpos de ventaja sobre irwin, al cabo de 1'59"22/100. Abonó nada menos que $ 47,10 por peso apostado.
Fue la segunda victoria en cinco salidas para el caballo criado por Phalaris SRL, que venía de salir de perdedor a fines del mes pasado en la milla de césped y pegó un salto enorme. Por línea sanguínea debería llegar bien a la larga distancia y probará suerte en la arena palermitana, que no conoce, en el Nacional (G1-2500 metros) o viajará directamente al Carlos Pellegrini (G1-2400 metros) a disputarse en el escenario de su consagración.
En una tarde soñada para la generación 2018, Holi Rimout (Remote) se quedó con el Gran Premio San Isidro (G1-1600 metros). Conducido por Aníbal Cabrera, el representante de la caballeriza El Chesco Viejo vino siguiendo al puntero Codringer (Cosmic Trigger) y en la recta final lo fue a buscar.
Lo dominó a 400 metros de la línea de sentencia y a partir de ese momento escapó a la victoria para arribar al disco con tres cuerpos de ventaja sobre el veterano Hole In One (Heliostatic) al cabo de 1'32"19/100 para la milla, un excelente registro por cierto.
Fue la segunda victoria en ocho presentaciones para el pupilo de Marcelo Blanco, la primera dentro del plano jerárquico en el que había logrado buenos arrimes dentro del proceso selectivo de su generación, incluyendo un tercer puesto en la Polla de Potrillos (G1). El ejemplar criado en el Haras Firmamento abonó $ 5,55.
En el Gran Premio Suipacha (G1-1000 metros) se impuso la potranca Senegalesca en un final para el infarto, en el que cuatro competidores llegaron juntos en medio cuerpo. La potranca de la caballeriza St. Hs. Yo. Bru. Gi superó por ventaja mínima a Yuto Bataraz Key (Key Deputy), que, tras un desarrollo complicado, achicó al final pero se quedó corto.
Tercera, a media cabeza quedó la veterana Queen Liz (Lizard Island) y cuarto, a medio pescuezo más, terminó Agiosto (Angiolo) al cabo de 54"44/100. La bandera verde flameó durante varios minutos, pero finalmente festejaron los que confiaron en las cualidades de la conducida por William Pereyra, que es entrenada por Juan Franco Saldivia.
De esta manera, la criada en el Haras El Paraíso sumó su tercera victoria en cuatro salidas, la primera dentro del plano jerárquico. Recompensó a sus seguidores con un dividendo de $ 10,10.