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El piloto capitalino, a los 28 años, no baja los brazos y quiere retornar por la puerta grande, luego de más de un año de ausencia en un equipo de plataforma automotriz. "Todos los días sueño con mi regreso", soltó Vivian.
Sin dudas, Franco Vivian es el arquitecto de sus sueños: construyó su trayectoria como piloto a temprana edad, la levantó y la potenció, luego apuntó con todo a recibirse en la Universidad de Buenos Aires como tal y ejercer su profesión, por lo que ahora, muy lejos de darse por vencido, trabaja para regresar algún día a un equipo oficial del Súper TC 2000.
Días atrás, el porteño fue invitado por Sebastián Pereyra para "La Carrera de Las Estrellas del TC 2000" y sobre el Chevrolet Cruze del Pro Racing la dupla no desentonó: fueron novenos a lo largo de las exigentes 42 vueltas y relegaron, incluso, a un pelotón joven en Buenos Aires.
"Lo que más disfruto es haber vuelto a subirme a un auto de carrera y más con Seba Pereyra que es un amigo personal de muchos años. Sentí que me saqué las ganas y me da una tranquilidad que sin estar todos los fines de semana corriendo puedo seguir siendo competitivo. Disfruté muchísimo de la experiencia", se sinceró en Diario Popular.
Más allá de su invitación al TC 2000, la meta de Franco Vivian es regresar al Súper, aquel que lo tuvo como piloto oficial Chevrolet en su momento y que lo vio tener muchas alegrías, pero un día, todo se terminó y el capitalino tuvo que ver las carreras desde abajo del auto.
Pero no se quedó quieto: se sumó al staff televisivo de Carburando como comentarista de notas técnicas y puso sus energías full time a la empresa constructora familiar, en pos de ejercer como arquitecto, ya que se recibió hace dos años.
"Mi profesión me lleva mucho tiempo y además disfruto mucho de mi labor en Carburando, lo hago para seguir vinculado al automovilismo y plasmar conocimientos. En este momento mi trabajo como arquitecto me reditúa mucho más que ser piloto, pero no bajo los brazos y seguiré corriendo en autos hasta donde me dé el cuerpo. Estuve 23 años ligado a los autos de carrera, pero hoy vivo de lo que estudié tanto tiempo. Me mantengo en estado físico, de todos modos, y entreno con un Fórmula Renault y un karting, para estar en actividad y no parar", confió el piloto-arquitecto.
Vivian, en tanto, deslizó que en sus planes no está ejercer como consejero de pilotos, excepto Martín Moggia, a quien le tiene un afecto especial: "No me veo apadrinando corredores jóvenes, aunque en el pasado di clases de karting. En un momento intenté involucrarme políticamente en la FRN pero no quise ahondar mucho porque quiero seguir corriendo, tengo 28 años todavía y mi esperanza está en regresar".
Con la sinceridad sobre la mesa, Franco manifestó que le encantaría subirse a cualquier auto de carrera de cualquier categoría, todo sea por regresar al mundo de las cuatro ruedas, pero lo que más lo tienta es el Súper TC 2000: "Es donde mejor me veo, porque hay diez pilotos muy buenos, de lo mejor del país a los cuales les pagan para correr. Yo formé parte de ese grupo de corredores oficiales y quiero apuntar a estar ahí, hacer méritos para competir de manera profesional nuevamente. Si quisiera ir a otra divisional, consigo el presupuesto y ya está, voy y corro donde sea, pero mi idea es otra. El Súper TC 2000 es mi aspiración y yo todos los días sueño con volver".
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