El jugador de básquet Tyler Honeycutt, que militaba Khimki de Rusia, se suicidó durante un intercambio de disparos con la policía que tuvo lugar esta pasada madrugada.
“En relación con el tiroteo de anoche (...) parece ser que el sospechoso no fue alcanzado por un disparo de un agente. El sospechoso parece mostrar heridas propias con un disparo a sí mismo”, informó a través de las redes sociales la Policía de Los Ángeles.
Los hechos tuvieron lugar después de que las autoridades acudieran a la residencia familiar de los Honeycutt, en el barrio de Sherman Oaks, en respuesta a una llamada de la madre del alero, que alertó a la policía de que su hijo estaba comportándose de “manera errática”, según el periódico deportivo Deadspin.
Cuando cesó el fuego, un equipo de las fuerzas de operaciones especiales (SWAT) entró en la vivienda y confirmó la presencia de un cadáver.
“Los SWAT entraron en la residencia y localizaron a un hombre que no daba muestras de vida, por lo que lo declararon muerto en la escena del crimen”, informó a primera hora del sábado la Policía de Los Ángeles.
Las autoridades continúan en estos momentos en el lugar de los hechos, llevando a cabo la investigación pertinente y “recopilando todas las pruebas existentes”, señalaron las autoridades que, además, informaron de que ningún agente resultó herido durante el incidente.
A pesar de que aún no existe confirmación oficial de la muerte de Honeycutt, diversos jugadores de primer nivel han reaccionado ya a su supuesta muerte.