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Boxeo/ La pelea por el título argentino femenino ligero tuvo un pésimo fallo (empate) que perjudicó a Benavídez una vez más. ¿Algo en su contra o qué?
Nuevamente el boxeo argentino se encontró con su peor cara el viernes pasado en el Complejo de Los Camioneros de Luis Guillón. Un pésimo fallo privó a la chaqueña Paola Benavídez de alzarse con el triunfo y el título argentino ligero, de manos de la sanjuanina Yamila Abellaneda, a quien beneficiaron con un empate que sólo vieron dos de los jueces, y con el cual conservó su corona.
Indigna porque no puede soslayarse que la campeona es sponsoreada (y manejada, prácticamente) por el gremio de Los Camioneros, que –se conoce- financió el espectáculo. Y porque Paola, otrora selección nacional y laureada amateur, considerada en su momento la número 1 del mundo en el terreno aficionado, de 35 años y que reaparecía tras uno y medio, le ganó todas las vueltas, de la primera a la última, con un boxeo claro, pulcro, limpio, pegando en todos los asaltos varios golpes más que su rival, con total nitidez.
No hubo episodio que dejara dudas, salvo algún atropello torpe de la sanjuanina, que embestía impotente, a veces sólo para chocarse contra los puños de la chaqueña. Ni siquiera el 8º, que algunos “quisieron ver” para la sanjuanina, pese a que recibió tupido.
Técnica, cantidad de golpes y defensa, tres de los criterios que pondera nuestro reglamento FAB para fallar combates, fueron dominados sin discusión por Benavídez, como si fuera de blanco a negro. Eficacia (efecto en los golpes, el cuarto concepto) no hubo por parte de ninguna, ni caídas, ni trastabilleos, ni obnubilaciones, por lo tanto no pudo evaluarse, menos argumentarse nada por el estilo.
Sería bueno saber entonces en qué se basaron los jueces Geido y Gorreri para dar 95-95, más allá de la localía y quizás la presión, que en muchos casos alguno de estos jueces demostraron no sentir.
El tercero, Jorge Gorini, echó cierta justicia con su 97,5-95 para Benavídez, también insuficiente por cómo fue la pelea de holgada. Hasta la “tarjeta de la gente”, que se estrenó hace un par de semanas en TyC Sports, dio 9 rounds a 1 para Benavídez, herramienta que ahora expresará el sentir popular y dejará al descubierto tales injusticias, y discrepancias que ya no sólo serán periodísticas.
La chaqueña está acostumbrada a que la perjudiquen, porque más de una vez lo hicieron. Sin ir más lejos, tiene un empate y una derrota ante la Bonita Bermúdez, a quien dominó claramente en ambas peleas, con una exhibición notoria que cuesta entender por qué no le reconocen.
