Una discapacitada fue degollada en su vivienda del partido de Moreno y todo apunta a que el crimen fue cometido “por algún conocido”, con fines de robo, tras ser golpeada, presuntamente para que revelara dónde guardaba una suma de dinero. La mujer vive con su hermano, también anciano y jubilado, que dijo no haber escuchado nada, debido a que toma medicación para dormir y el ataque mortal se habría registrado durante la madrugada. Este homicidio, que se inscribe en un episodio de inseguridad, ocurrió en el interior de una casa, sita en las calles Martín Fierro y Brasil del barrio San José de Moreno y un dato que manejan los investigadores del caso apunta a que el autor del crimen podría estar vinculado al entorno de la víctima, quien conocía que por encontrarse en silla de ruedas y por los problemas motrices que también afectaban a su octogenario hermano “dejaban las llaves escondidas en la parte delantera del domicilio, para que sus familiares y amigos ingresaran, sin que ellos tuvieran que salir a abrirle la puerta”.
El cuerpo sin vida de Irma Ramírez (de 73 años) fue hallado en las primeras horas del pasado miércoles, tirado en su habitación, con signos de haber recibido varios golpes de puño en el rostro y con un profundo corte en el cuello, producido por un arma blanca. La mujer utilizaba silla de ruedas para desplazarse y eso le habría impedido ofrecer mayor resistencia, pero su pedido de auxilio no habría sido escuchado por su hermano, quien dormía en otro sector de la vivienda, bajo los efectos de un sedante que consume para poder descansar, ya que se trata de un anciano con problemas de salud y también discapacitado. “Los que hicieron esto o el que hizo esto tendría conocimiento de la rutina de los jubilados, que tenían problemas para movilizarse, que dejaban la llave escondida afuera y alguien aportó el dato sobre que guardaban una suma de dinero o tenían cosas de valor”, señalaron los investigadores del caso, en relación a la principal hipótesis sobre que se trató de un homicidio en ocasión de robo. “La habitación en donde encontraron el cadáver había sido revuelta, pero los investigadores todavía intentan determinar si se llevaron algún elemento de valor o si se trató de una maniobra para despistarlos sobre el motivo del crimen”, consignó el portalSM Noticias, dando cuenta de otra versión de lo sucedido, aunque coincidiendo en que Irma Ramírez y su hermano “dejaban las llaves escondidas en el exterior, para que sus familiares y visitantes pudieran ingresar si la necesidad de que ella fuera a abrirles”, en relación a la manera en que los sujetos habrían ingresado a la casa.