La criptomoneda más utilizada en el mundo se desplomaba 5,42% en las últimas 24 horas y 25,05% en la última semana, alcanzando un valor de US$ 22.205,89 la unidad, un mínimo que no se observaba desde diciembre de 2020.
La cotización llegó incluso a perforar los US$ 22.000 durante este martes a la madrugada; este derrumbe se ve impulsado por el inminente anuncio de subas de tasas por la Reserva Federal estadounidense (FED).
La FED, que aumentó su tasa de interés de referencia 0,25% en marzo y 0,50% el mes pasado ubicándola en un rango de 0,75% a 1%, anunciará este miércoles una nueva alza, la cual el mercado ya apuesta que podría ser más amplia de lo esperada y llegar a los 75 puntos porcentuales.
Dichas alzas repercuten en los activos de mayor riesgo como las acciones -especialmente las tecnológicas- y las propias criptomonedas al volverse más atractivos los bonos de deuda.
A esto se sumó el lunes el “corralito” dispuesto por el prestamista de criptomonedas Celsius, que frenó los retiros y transferencias de sus clientes.
La medida agudizó el temor por una falta de solvencia de la firma, y generó un efecto contagio al resto del mercado.