El informe señaló también que "el precio de la carne vacuna está subiendo a mayor ritmo que otros precios y esto tiene un fuerte impacto en el presupuesto de los consumidores".
A modo de ejemplo y de acuerdo con los precios promedio que publica el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) para el Gran Buenos Aires, en el último año la carne picada común subió un 64% y el asado tuvo un incremento del 96%.
LAS SUBAS EN CUATRO AÑOS
El estudio indicó además un desglose de los aumentos de distintos cortes. Por ejemplo, en cuatro años el precio del kilo de asado subió 428%, la carne picada común 426%, la nalga 417% y la paleta 416%.
De acuerdo con el análisis de IARAF, la suba del precio relativo de los cortes de carne vacuna tiene diferentes impactos a nivel regional dada las diferentes estructuras de consumo.
Según se indicó, en los últimos cuatro años (de abril de 2017 a abril de 2021) la categoría Carnes y Derivados creció más que Alimentos sin carnes y derivados en todas las regiones, y lo mismo sucedió si se compara con el Nivel General que excluye Carnes y Derivados.
Para aislar el crecimiento nominal de los precios que implica la inflación se puede considerar la evolución del precio relativo de carnes y derivados respecto al resto de los bienes y servicios.
Mientras que el precio relativo es aquel precio de un bien o servicio que está expresado en términos de otro determinado bien o servicio.
FUENTE: NA