Ante la infinidad de versiones sobre el presunto levantamiento de la pantalla de El Trece de ShowMatch, a raíz del conflicto empresarial entre Marcelo Tinelli y el grupo de medios Indalo, ayer en Este es el Show, el productor del programa, Pablo Chato Prada, salió al cruce de los rumores para confirmar que Bailando por un Sueño 2016 sale al aire a fines de abril o en mayo.
El conductor del ciclo, José María Listorti, a grito pelado y con gran algarabía festejó: "¡Se hace!". Mientras en horas del mediodía Jorge Rial, conductor de Intrusos -en América- anunciaba reunión cumbre entre la mano derecha de Tinelli, Fabián Scoltore y Fabián De Souza para poner fin a la sociedad y esto implicaba un stand by del Bailando.
El Chato Prada, ante la pregunta de Listorti sobre si salía en el envío, contestó: "No te preocupes, te vas a poder ir a Miami"."¿Se hace la apertura con la parodia de la película El Náufrago?", insistió Listorti. A lo que Prada se limitó a afirmar a medias: "No puedo decir. Seguramente será El Náufrago".
Este año, Tinelli carga con el fantasma de la falta de presupuesto. Para la apertura, se comenta, que necesitaría un desembolso de 80 millones de pesos y ese dinero, si es cierto, no estaría disponible.
Además, Marcelo tiene una batalla judicial por delante si es que se complica el pedido de disolución de la sociedad (Tinelli tiene contrato con el grupo Indalo hasta fines de 2016 como conductor, en 2017 se vence el contrato con El Trece y en 2022 se vence su contrato como CEO de Indalo). El conductor esbozaría como defensa la falta de pago, es decir, una deuda de nueve meses por la compra de la productora valuada en unos 20 millones de dólares.
En caso que rescinda el contrato con Indalo a Tinelli no se le acabarían los problemas económicos porque en caso de que lo produzca el canal de Constitución, tal como pretende el conductor, tampoco le abrirán la billetera para un gasto de 80 millones en una apertura.
Para Tinelli se trata un año bisagra en su carrera como productor y conductor. En 2014 vendió la mayoría de las acciones, el 80 por ciento al grupo Indalo y a casi tres años la sociedad estaría a punto de disolverse por pedido del conductor, a raíz de las denuncias periodísticas y judiciales contra el grupo por evasión fiscal e impositivo por una cifra millonaria.