María Eugenia Ritó va por todo contra su ex

La pareja aún está casada, Ritó no se cansa de decir que sigue siendo "la señora de Salinas" y por eso contrató a la abogada más temida de los maridos, Ana Rosenfeld, para que le lleve adelante las cuestiones legales en torno a un juicio de divorcio que aún no comenzó pero que pinta para polémico.

Del lado de Salinas aseguran que no está dispuesto a cederle ninguna de las propiedades que están a su nombre, mucho menos los autos y el dinero. Pero Ritó sabe que tiene derechos y por eso exigirá lo que le corresponde. Ayer en C5N fue Rodrigo Lussich quien comenzó a contar las propiedades que están bajo observación de la Justicia a la hora de la división de bienes.

"Ritó realizó declaraciones muy fuertes la semana pasada, confesando que se prostituyó y que Salinas la conoció siendo cliente. Salinas ahora sale con una abogada, y la primicia es que Ritó lo amenaza diciéndole que si no le otorga en la división de bienes lo que ella quiere, va a contar más cosas públicamente. Ritó reclama un barco en Punta del Este, un departamento en Punta del Este, otro en Miami y tres en Buenos Aires, además de tres autos de alta gama", contó.

Salinas trató de mantener en secreto su relación pero desde que Paparazzi lo descubrió comenzaron sus problemas. Porque Ritó en su momento mantenía la esperanza, el deseo, de poder recomponer la relación y reencaminar su matrimonio. Pero las fotos de Marcelo con Alejandra Cambrán rompieron aún más el corazón de la vedette y echaron por tierra cualquier posibilidad de retorno. Desde ese momento, Ritó cambió la esperanza por furia y un pedido desesperado por el divorcio.

"En su momento, me puse mal. Pero no me pongo mal porque esté con otra mujer. Por mí, puede estar con quien él tenga ganas, con un hombre, con dos hombres, una travesti, dos mujeres. Ahora sí obviamente, después de ver estas cosas, más bien que quiero el divorcio y lo antes posible", dijo con la revista en su mano. Ahora la batalla legal comienza a plantearse. Las casas, departamentos y autos de alta gama que hay para repartir suman varios millones de dólares, por lo que Ritó no piensa regalar ni un solo centavo. Ya no pelea por la recomposición de una relación que el propio Salinas decidió terminar, ahora la pelea es por dinero.