Una de las animadoras del encuentro de la Canción Social, celebra los nuevos puentes culturales que aparecen en la región por fuera de los circuitos comerciales.

Se están tendiendo nuevos puentes de intercambio cultural" en la región, indica la cantante peruana Miryam Quiñones, desde Madrid, España, donde realiza una gira tras la cual vendrá a país para participar junto a otros quince artistas del Encuentro de la Canción Social Latinoamericana y del Caribe Canto con Todos . La reunión de trovadores se hizo por primera vez en 1999 en Cuba y luego tuvo ediciones en Chile, Brasil, Ecuador y Paraguay, pero se apagó desde 2010 hasta ahora, cuando tendrá en Argentina -y con el apoyo del Ministerio de Cultura de la Nación- dos fechas gratuitas, el miércoles en el Teatro Cervantes (Libertad 815) y el viernes en la Universidad de Lanús (29 de Septiembre 3901, Remedios de Escalada). La difusora de la trova latinoamericana que hoy por hoy pasa más tiempo en Buenos Aires que en Lima intervino en algunas anteriores ediciones del Encuentro ("una experiencia feliz, a todo nivel"), impulsado por el cubano Vicente Feliú, uno de los visitantes junto a la venezolana Cecilia Todd, el paraguayo Ricardo Flecha o el nicaragüense Luis Enrique Mejía Godoy. La intérprete anticipa que en todos los artistas actuarán en ambos conciertos y sobre el equipo que se armó para la ocasión señala: "Creo que se realizó una estupenda selección, con cantores que llevan ya un largo camino de trabajo y compromiso serio y perseverante. Hay por supuesto muchos más que seguramente serán convocados en futuros encuentros".

l ¿Los pueblos de la región conocen lo suficiente la música de los países hermanos?

-Quizá aún no tanto como quisiéramos, pero veo con alegría que, de un tiempo a esta parte, se están tendiendo nuevos y buenos puentes de intercambio cultural, y eso siempre se celebra.

l ¿Es éste un momento fructífero para que los poetas e intérpretes se escuchen en la región?

-Sí, definitivamente. Se están dando en los últimos años muchos encuentros, en diversos países de la región, en algunos casos autogestionados por los mismos cantores que desean conocer y compartir con otros artistas que transitan por la misma senda, así como con un público que está ávido de recibir nuevas propuestas musicales, que vayan más allá de lo que se presenta por el circuito comercial. Hay algunos países que tienen además la fortuna de contar con políticas culturales que favorecen estos eventos e intercambios.

l ¿Hay un resurgimiento de la canción sensible a la realidad social? ¿Considerás que hubo alguna época de bache?

-Siempre ha habido, y habrá, cantores sensibles a su realidad y a las necesidades de su entorno, y que se animan a cuestionar aquello que consideran que está mal. Que en determinado momento o lugar se les difunda más o menos, ya es otra cosa.

l ¿Considerás que existen relaciones entre el tipo de canción de una época y los procesos sociales-políticos?

-Considero que el cantautor suele ser, en mayor o menor medida, una suerte de cronista de su tiempo, y en ese sentido su cantar está inevitablemente influenciado por el contexto dentro del cual le toca vivir. Lógicamente, dependiendo del lugar y época en que desarrolle su camino, su propuesta tendrá determinadas y particulares características.

l ¿Qué esfuerzo extra precisa la música no sostenida por la industria?

-Imagínate, ya de por sí elegir el arte como forma de vida es complicado (un poco más, un poco menos, dependiendo del lado del mundo en que te encuentres). En nuestro caso además, haber elegido un tipo de propuesta que no es en absoluto comercial, nos lo pone bastante más difícil aun. Pero felizmente, creo que cada vez hemos ido tomando más conciencia de que la única forma de salir adelante es trabajando de manera seria y constante, dejando de lado las quejas y saliendo a hacer que las cosas sucedan. La mayoría somos nuestro propio todo: nos dedicamos tanto a la labor artística como a la de producción, promoción, prensa, etcétera; y si bien eso implica un gran esfuerzo extra, nos da a la vez una libertad de acción y una independencia que a mi modo de ver es importantísima.

      Embed