La actriz aseguró que su fe le permite ese tipo de contactos. El
último fue luego de podar un árbol que se le había derribado en la casa
La actriz Susana Romero volvió a tener una experiencia de fe. El último 21 de noviembre volvió a ver a la Virgen María en su casa. Un pino de treinta metros de altura y cincuenta años de antigüedad cayó y al seccionarlo se encontró la imagen, justo a las seis de la tarde, en la hora del crepúsculo.
“La Virgen se me presentó varias pero no lo daba a conocer porque sufrí mucho, la gente se burlaba. El razonamiento del ser humano es que estoy loca. Si averiguás, el 21 es el día de la presentación de la virgen de la Medalla Milagrosa. Siempre tuve un amor muy grande hacia todo lo espiritual pero empiezo a rezar en el 2002, cuando en una manifestación me pidió que lleve un mensaje de fe, amor y esperanza y así hice”, contó.
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