Fútbol
Eliminó con sorpresa al Caracas en Venezuela y ahora amenaza al equipo del Vasco en octavos. El conjunto paraguayo tiene apenas 6 años de vida y cuenta con un pequeño estadio con capacidad para 10 mil espectadores
Deportivo Copiatá es la cenicienta de la Copa Sudamericana. Con apenas seis años de vida, se cruzará en los octavos de final nada menos que con Boca, un gigante centenario de América.
El equipo paraguayo eliminó con sorpresa al Caracas, en Venezuela, al vencerlo por 3 a 1, luego de igualar 1-1 en la ida, en su pequeño estadio para 10 mil espectadores que sus hinchas rara vez llenan. En algunos casos, miran los partidos desde arriba de los árboles.
El club "mitológico", como lo llaman, se fundó el 4 de septiembre de 2008 en la ciudad homónima, situada a 16 kilómetros de Asunción, fruto de la fusión de todos los clubes que integraban la liga local, e ingresó a la competición profesional en segunda división.
Tiene camiseta azul y amarilla, pero a diferencia de Boca, los colores están distribuidos en forma vertical, como Rosario Central, el anterior rival del "Xeneize" en el certamen continental. El año pasado, en su primera temporada en Primera, logró clasificarse para la Copa.
El Copiatá viajó a la capital venezolana en busca de un milagro y en compañía de dos consejeros espirituales para consumarlo. A su vez, un hincha del equipo que durante toda la semana les regaló a los jugadores imágenes de la Virgen de Caacupé, se ganó el derecho de acompañar al plantel a Caracas. El viaje se lo pagó el presidente del club.
El club "mitológico", como lo llaman, se fundó el 4 de septiembre de 2008 en la ciudad homónima, situada a 16 kilómetros de Asunción, fruto de la fusión de todos los clubes que integraban la liga local, e ingresó a la competición profesional en segunda división.
Tiene camiseta azul y amarilla, pero a diferencia de Boca, los colores están distribuidos en forma vertical, como Rosario Central, el anterior rival del "Xeneize" en el certamen continental. El año pasado, en su primera temporada en Primera, logró clasificarse para la Copa.
El Copiatá viajó a la capital venezolana en busca de un milagro y en compañía de dos consejeros espirituales para consumarlo. A su vez, un hincha del equipo que durante toda la semana les regaló a los jugadores imágenes de la Virgen de Caacupé, se ganó el derecho de acompañar al plantel a Caracas. El viaje se lo pagó el presidente del club.
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