La empresa PC-Arts, fabricante de computadoras Banghó, redefinirá su estrategia comercial para competir con las nuevas reglas de mercado y descartó que se produzcan despidos en el corto plazo, a la espera de una solución para los 183 trabajadores suspendidos a raíz de la eliminación de los aranceles para la importación de productos informáticos.
“No vamos a cerrar, aunque es posible que tengamos que pensar en una empresa más comercial que productiva, reconvertida a las nuevas reglas de juego”, señaló el director de Banghó, Pablo Suaya. El empresario aclaró que “las suspensiones se produjeron por 60 días a mediados de febrero con acuerdo de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) y pensamos también en los 460 trabajadores que están activos que seguramente forman parte de nuevos proyectos que tenemos en marcha”.
“La marca va a seguir con fuerte presencia, probablemente con otro concepto de producto; veremos si podremos fabricar algo para el programa Conectar Igualdad, en cuya licitación nos presentamos”, añadió Suaya.
La empresa comunicó ayer oficialmente que, en función de la eliminación de aranceles para importar, diversificará su esquema de negocios. PC-Arts Argentina desarrolló “un plan que aprovechará las condiciones favorables a la importación de productos de tecnología informática para continuar el desarrollo de sus actuales negocios de distribución mayorista de marcas globales”.