Mario Roberto Romero vive en Formosa y tiene cáncer, con un cuadro gravísimo con metástasis que complica gravemente el cuadro de su salud.
Sus cuatro hijos viene en la ciudad de Arroyito, en Córdoba, y no pueden ir a verlo, incluso luego de realizarse los respectivos test de coronavirus, que tuvieron un resultado negativo.
A pesar de cumplir la exigencia que les planteaba la gobernación formosena, no pudieron comenzar su viaje y también se les negó la posibilidad de un avión sanitario para llevar a su padre a Córdoba.
Ese caso se suma a otros tantos en medio de pandemia de coronavirus , con personas que no pueden visitar a sus familiares en grave estado de salud cuando tienen que atravesar varias provincias.
Macarena, Maximiliano, Mailen y Leandro son los hijos de Mario, que vive sólo en Formosa.
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“Desde Formosa solo nos daban una ambulancia para que lo crucemos hasta Mansilla, el límite entre Chaco y Formosa, y desde ahí nos decían que lo crucemos con la otra ambulancia que nos facilita la municipalidad de Arroyito. Era demasiado esfuerzo para nuestro papá que está grave. En Formosa se lavaron las manos: a mi papá lo querían cruzar como a un perro y es un ser humano”, informó su hija Carmela.
Ante los pedidos y el reclamo que se viralizó en las redes sociales, se encontró una solución que quizás no sea la más indicada.
El intendente de Arroyito, Gustavo Benedetti, les ofreció una ambulancia para que Macarena y Maximiliano Romero pudieran viajar hasta Formosa, buscar a su padre.
De esta modo, podrán trasladarlo a Córdoba, en un viaje de 13 horas en ambulancia, que no es lo recomendable para un paciente oncológico.
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