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¿Cansado de que se te lave a las tres cebadas? ¿Harto de que compañeros, amigos y amantes se mofen de tus "verdes"? Aquí, una simple guía de cómo preparar un mate como la gente.
Que preparar un mate no es ninguna ciencia, eso lo sabemos todos. Ahora, cómo hacer para que no se te lave rápidamente la yerba y que no se mofen los siempre presentes "cebadores experimentados" de todo grupo humano rioplatense, eso ya no es tan vox populi.
Por eso, en este Día Nacional del Mate, y para que nadie más critique tus "verdes", te contamos cómo hacer un gran mate en ocho simples pasos.
1- Calentar el agua y dejarla a una temperatura de entre 70 y 80°C, y vertirla después en un termo.
2- Poner yerba dentro del mate hasta alcanzar las tres cuartas partes del mismo.
3- Tapar con una mano la boca del mate, darlo vuelta y agitarlo unos instantes. El objetivo de este procedimiento es lograr que las partículas más finas queden en la parte superior del mate, ya que esto disminuye la posibilidad de que pasen por la bombilla o la tapen. Luego, volver el mate a su posición nhabitual.
4- Cuidar que la yerba quede inclinada, recostada sobre una de las paredes del mate, formando así un pequeño agujero.
5- Vertir agua tibia suavemente en el hueco que quedó en la yerba e iniciar el mate con agua tibia, lo cual permitirá que no se queme la yerba y pierda su gusto. Dejarla reposar unos instantes.
6- Introducir la bombilla en el hueco húmedo.
7- Una vez llevados a cabo estos pasos, comenzar a cebar el mate, procurado no mover la bombilla. Es fundamental cebar siempre en el mismo lugar, ya que esto permitirá que no se moje toda la yerba y el mate no se lave rápidamente.
1- Calentar el agua y dejarla a una temperatura de entre 70 y 80°C, y vertirla después en un termo.
2- Poner yerba dentro del mate hasta alcanzar las tres cuartas partes del mismo.
3- Tapar con una mano la boca del mate, darlo vuelta y agitarlo unos instantes. El objetivo de este procedimiento es lograr que las partículas más finas queden en la parte superior del mate, ya que esto disminuye la posibilidad de que pasen por la bombilla o la tapen. Luego, volver el mate a su posición nhabitual.
5- Vertir agua tibia suavemente en el hueco que quedó en la yerba e iniciar el mate con agua tibia, lo cual permitirá que no se queme la yerba y pierda su gusto. Dejarla reposar unos instantes.
6- Introducir la bombilla en el hueco húmedo.
7- Una vez llevados a cabo estos pasos, comenzar a cebar el mate, procurado no mover la bombilla. Es fundamental cebar siempre en el mismo lugar, ya que esto permitirá que no se moje toda la yerba y el mate no se lave rápidamente.