En medio del aislamiento social, preventivo y obligatorio instaurado por el coronavirus, los ancianos dijeron: "Somos mayores, estamos solitos y queríamos invitarlos a tomar mate y charlar a nuestra casa”, se escuchó del otro lado del teléfono. Se trataba de un matrimonio sin hijos que vive en Villa Cabello.
A pesar de lo inesperado, los policías no minimizaron la solicitud de sus vecinos y dieron intervención al personal de la Comisaría de la Mujer que ese mismo día se acercó al domicilio.
Tras la visita, se resolvió que una psicóloga se entrevistara con ellos por lo menos una vez por semana para hacer un seguimiento de su situación y también se acercó personal de Salud Pública para evaluar el estado socioambiental de la pareja.