El conocido predicador y evangelista Luis Palau falleció este jueves en su casa de Oregon, Estados Unidos, luego de sufrir desde hace años una cáncer terminal.
Palau, quizás uno de los evangelistas más reconocidos del continente y el mundo, tenía 86 años y luchaba contra el cáncer desde hace tiempo. “Si me toca quedarme, que pueda honrar al Señor hasta el último día de la vida. Si el Señor me lleva, me gozo en el Señor”, dijo en una oportunidad.
Predicador protestante que convocó multitudes -como en un recordado festival organizado en el Obelisco, en 2008-, Palau fue un frondoso autor y best seller de libros sobre religión y autoayuda.
El predicador y pastor protestante, considerado entre los más influyentes líderes de fe en habla hispana del mundo, nació en Ingeniero Maschwitz y hace años se había nacionalizado estadounidense. La sede de su asociación religiosa se ubica en Portland, Oregon, donde Palau había sido internado en un hospital para recibir cuidados paliativos.
La "Asociación Luis Palau" lo despidió como "uno de los contados hombres que le hablaron a más personas en el mundo". Aseguró que "su mensaje fue, y es escuchado por más de 800 millones de personas en 112 países a través de la radio y la televisión, y tiene el privilegio de haberle hablado a más de 22 millones de personas cara a cara en 80 países del mundo".
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Uno de esos encuentros masivos de los que participó fue el realizado en 2008 en el Obelisco donde se calcula que habló ante medio millón de asistentes la primera noche y un millón la segunda.
Palau surfeó la ola más grande del evangelismo, ese grupo escindido del catolicismo tras la reforma protestante, que desconoce la autoridad del Papa —aunque uno de los momentos más polémicos de Palau fue su celebración del nombramiento de su compatriota Francisco— y solo acepta la Biblia como fuente religiosa.
Poco antes de que él realizara su campaña fundadora en Colombia, el Consejo Vaticano II decidió que los protestantes no eran herejes sino solo “hermanos separados”. Los años que siguieron fueron de la explosión del pentecostalismo en América Latina.
Palau fue creciendo hasta convertirse en la voz principal del evangelismo para los hispanos y en los países de América Latina, con una iglesia valuada en casi US$ 8 millones y una tasa de crecimiento del 6% anual, aunque muy dependiente de las donaciones.
Hacia el final de su vida había llegado a predicar en 112 países ante un total estimado en 1.000 millones de personas y sus programas de radio —Cruzada con Luis Palau, Luis Palau responde— se repetían en más de 2.000 estaciones de casi 50 países.
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