Tras la derrota con Argentino de Quilmes y el flojo arranque en el campeonato, crecen los cuestionamientos al trabajo de Juan Fulgencio Alvariño.
La goleada ante Sportivo Italiano, en la última presentación como local, generó confianza en el Mundo Laferrere, no sólo por el resultado abultado, sino por la producción futbolística. En una semana, el 0-3 en la barranca quilmeña vino a profundizar el mal inicio en el torneo, con un par de empates, otra dos derrotas y solo un triunfo.
Con apenas cinco puntos ni siquiera está en zona de reducido, al que clasifican hasta el ubicado en el noveno puesto. Esto recién empieza, pero los tiempos se acortan cuando la "obligación" es tan grande. Tras la caída ante el "mate", en una presentación para el olvido del "verde", llovieron las críticas y hay quienes dicen que Alvariño fue "apretado" por algunos barras para que diera el paso al costado. No obstante, el plantel hizo una fuerte autocrítica.
Aquella victoria en Copa Argentina frente a Argentinos Juniors había "maquillado" la decepción por el ascenso que se escapó en la temporada pasada, pero la posterior eliminación en los 16vos. de final ante Almagro en los penales y sin que la gente pudiera asistir, más este flojo arranque en el torneo, hicieron renacer la bronca entre la gente del "villero". Y en ese contexto, pese al pasado glorioso del "Negro" Alvariño, ahora en su función de técnico es cuestionado por ciertos cambios en la formación y quedó dependiendo de una serie de buenos resultados para que su futuro en el cargo no corra peligro.