"La eternidad de la rosa": un viaje de lo paranormal a lo popular

La amalgama de situaciones paranormales con un intenso romance que atraviesa la columna vertebral del libro es otro. 

La novela que escribieron "a cuatro manos" Gabriel Moschitta y Laura González Roma se presenta, además, como un homenaje a uno de los artistas populares más queridos de nuestro país y eso también le suma... sobre todo porque, en realidad, no lo sabremos hasta el mismísimo final (ni lo anticiparemos en esta nota, por supuesto).

La historia central es el padecimiento de un joven que todas las noches tiene sueños inquietantes, en los que él es el protagonista pero nunca es la misma persona. El escenario también cambia rotundamente, así como la época en la cual transcurre el sueño. Esta situación hace que consulte a Zerpa y es allí, en la investigación e intervención que hará el reconocido ovnílogo, donde lo que puede parecer cotidiano se vuelve extraordinario: posesiones de espíritus, vidas pasadas, chamanismo, hipnosis y hasta extraterrestres entran a jugar en la trama.    

DIARIO POPULAR conversó con sus autores.

DP: El libro mezcla ficción y realidad: ¿cómo manejaron esto con Fabio Zerpa, un personaje que es una persona real?

González Roma: Sí. Más ficción que realidad. De Fabio Zerpa tomamos sus rasgos más característicos, él lógicamente autorizó a que lo tomáramos como uno de los protagonistas de la historia y cumple un rol central en nuestra ficción.

DP: ¿Cómo y por qué decidieron escribir sobre los fenómenos paranormales?

Moschitta: Paranormal significa "más allá de lo normal" y creemos que es un desafío hablar de aquello que no es tan cotidiano. Utilizamos sólo un 10 por ciento de nuestra capacidad mental y en el futuro aquello que hoy interpretamos como paranormal se convertirá en  frecuente. Telepatía, precognición, telequinesis y muchas otras son capacidades dormidas y nos propusimos darle una "mirada natural" en nuestra novela,  sin prejuicio.

DP: ¿Por qué creen que lo paranormal atrae e interesa?

Moschitta: Porque todos, o al menos muchos de nosotros, hemos pasado en nuestras vidas por un hecho al cual no le encontramos explicación  racional. Nos sorprendemos y se despierta la curiosidad. Lo paranormal tiene algo de mágico también y la magia nos rescata, nos da esperanza... ¿No?

DP: ¿Cómo les resultó la experiencia de escribir "a cuatro manos"? ¿Cómo se organizaron para hacerlo?

González Roma: Cuando conocí a Gabriel, en 2010, él tenía una ficción  escrita. Me mostró aquel borrador y pensé: ¡Qué buena idea! Jamás  se me hubiera ocurrido. Empecé a contarle a Gabry cómo hubiera contado yo aquella historia. Él me propuso que la reescribiéramos. La idea original quedó (casi) intacta. El texto fue todo (casi) repensado.

La escritura a cuatro manos  resultó muy divertida. Me convertí en una traductora de mi propia lengua. Tomando las ideas de Gabriel escribí sin pausa. Él se sorprendía de cómo yo lograba interpretar su imaginación. Claro que algunos personajes quedaron en el camino y muchos otros nacieron conmigo. La protagonista femenina original se llamaba Laura (como yo) y ese fue el primer cambio importante que afrontamos: ahora es Paula.

Realmente no hubo mucho conflicto. Sólo a veces Gabry me pedía que deje "alguna palabra suya".