Mundial FIFA Rusia 2018 |
Con sus triplete ante Panamá, el 9 del Tottenham y máximo romperredes de la última temporada de la Premioer League alcanzó cinco conquistas en dos partidos, la misma cosecha que tiene la Pulga en cuatro Mundiales. No bebe, no sale de noche y coquetea con Real Madrid.
Su nombre suena como un huracán. Y su fútbol también. Harry Kane -"Hurricane", su apodo- es el máximo goleador del Mundial Rusia 2018. Con sus tres conquistas en la goleada por 6 a 1 a Panamá, el 9 del Tottenham alcanzó los cinco tantos en apenas dos partidos (le había convertido dos a Túnez en el debut), la misma cosecha que tiene Lionel Messi en cuatro Mundiales.
"Me llevo una pelota que me hace sentir orgulloso. No muchos jugadores hicieron un triplete en un Mundial", dijo, feliz, el atacante.
Nadie hizo más goles que él en los últimos cuatro años de la Premier League. En las temporadas 2015/16 y 2016/2017 fue el máximo artillero. Y terminó segundo en la más reciente (hizo 30 tantos, dos menos que la estrella del Liverpool, el egipcio Mohamed Salah) y en la 2014/15 (detrás de Sergio Agüero). Desde entonces fueron 135 goles que alimentan el deseo de Real Madrid de juntarlo con Cristiano Ronaldo.
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Keane tiene 24 años. Nació el 28 de julio de 1993 en Londrés y su primer club fue el Arsenal, que lo dejó ir cuando tenía nueve años. Arsene Wenger, legendario entrenador del club, todavía lo lamenta. Tottenham lo recibió en 2009, con 16 años. Para que ganara rodaje en primera división lo cedió sucesivamente al Leyton Orient, Millwall, Norwich City y Leicester City. Y a partir de 2013 no lo soltó más. Mauricio Pochettino, técnico argentino de los "Spurs", lo considera la pieza más importante del equipo.
El comportamiento de Keane es el de un señorito inglés: no bebe alcohol ni sale de noche. Lleva una vida feliz junto a su novia de toda la vida, Katie Goodland, con quien tiene un pequeño hijo (Ivy, de 1 año) y dos perros (Brady y Wilson). Keane se duerme temprano todas los días y lleva adelante un estricto plan alimenticio.
Su pase está valuado en una suma cercana a los 120 millones de euros. Tottenham desea disfrutarlo de por vida y él se siente feliz en su Londres querida. ¿Podrá retenerlo?
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