Con sus máscaras y esa brutalidad sonora inigualable, la banda liderada por Corey Taylor dio cátedra de puesta en escena en GEBA y volvió a dejar en claro que en vivo es una de las bandas más poderosas del mundo. Antes de Slipknot, A.N.I.M.A.L. y De la Tierra descargaron todo su poder y armaron las primeras oleadas de pogos. ¡Terrible noche!
Un show que los dejó caretas a todos... Después de unos eternos 10 años sin pisar estos pagos y en el marco de su gira épica "Prepare for Hell Tour" parida luego de quinto álbum de estudio "5: The Gray Chapter", los enmascarados Slipknot regresaron a la Argentina y rompieron todo. Un show verdaderamente imponente. Asesino a nivel sonoro, y hollywoodense en puesta en escena. Una furia visual y auditiva nunca antes vista. 

Pelaron el espectáculo que tanto, pero tanto merecían los fanáticos argentos. No como en aquel Obras del 2005 donde tocaron menos de una hora, y colgaron solamente una banderita detrás del escenario y listo. En ese momento la única puesta fueron ellos. Pero esta vez, además de toda su bestialidad musical con un setlist tremendo (faltaron temas, es cierto; pero estuvo buenísimo), el grupo que encabeza Corey Taylor trajo toda su parafernalia al club GEBA.

Los disfraces del horror de todos, las clásicas plataformas que suben y bajan y que además giran sin parar; una cabeza gigante de demonio con una pantalla que simulaba ser una especie de boca y cambiaba de color; fuego por todos lados, luces, láseres y otros efectos que hicieron flashear a cada una de las miles de almas presentes hasta más no poder. ¡IM-PAC-TAN-TE!
      Embed

Unos maestros de la estética

Slipknot volvió a demostrar que vivo es una de las bandas más poderosas, más salvajes del universo. Te pasa por arriba. Y es una bestialidad en todo: en sonido y en imagen. Primero suenan del re carajo. Explotan. Les vuelan el coco a todos; y encima los deja extasiados con la performance visual que pelan. Porque además de todo ese power colosal que parece que nunca termina de crecer, los Slipknot son los maestros de la estética

Ver a 9 tipos disfrazados (ellos se hacen llamar con números que van del 0 al 8), con máscaras horrendamente perfectas corriendo por todo el escenario y tocándose la vida cada uno en su instrumento, es impresionante. Y ver todo este despliegue en una escenografía de película -una puesta como las que hace rato no se ven en los recis rockeros y metaleros internacionales que se hacen en Argentina-, te deja sin palabras.  

      Slipknot_2.jpg

Y todos tienen un papel fundamental para este flasheazo. Claro que Corey Taylor desde esa voz impactante y su carisma, es el actor principal de este show-horror. Pero cada uno de los Slipknot tiene una presencia vital en la puesta de la muerte: el imponente Mick Thomson con esa guitarra violenta; el majestuoso violero Jim Root, que justo un día antes del show cumplió 44 octubres y Corey en dúo con el público le cantaron el feliz cumpleaños.

Los percusionistas, el fundador histórico "Clown" Shawn Crahan y Chris Fehn, arriba de esas plataformas del demonio que subían, bajaban, y giraban, y aportando esos golpes que industrializan el ñú metal sacado de los Slipknot; el loco del DJ Sid Wilson que no paraba de agitar ni un segundo por todo el escenario y de tirar magia con su tornamesa, en la tercera de las plataformas; Craig Jones dándole todo el vuelo con sus samplers y teclados, desde la cuarta plataforma. 

Y aunque que no son miembros oficiales de la banda, el bajista británico Alessandro Venturella y el baterista estadounidense Jay Weinberg (ambos formaron parte del último disco "5: The Gray Chapter"), fueron pilares de esta bestialidad sonora. Son más que un ladrillo en la pared colosal que es la base de Slipknot.

      slipknot_4.jpg

Crónica de un salvajismo anunciado...

El show que dieron los Slipknot fue de locos, y los metaleros -en su mayoría adolescentes- lo vivieron como locos. ¡Sacadísimos! Se mataron del primer al último tema. Con una resistencia física admirable. Porque el pogo fue salvaje, asesino. Y en todo momento, eh. No solo en los primeros temas como muchas veces sucede. Los pibes, muchísimos con los disfraces o las máscaras de sus ídolos, descargaron toda su furia en el campo de GEBA

En la intro con XIX, la gente juntó aire y energía, y en el arranque con Sarcastrophe la oleada de pogos fue demoníaca. Y así fue en cada canción. A cada instante: en The Heretic Anthem, Psychosocial, The Devil In I, AOV, Vermillion, Wait and Bleed, Killpop, Before I Forget, Sulfur, Duality, Disasterpiece, Spit it Out, y Custer. Después de unos minutos de impasse, con el público detonado, empezó a sonar la intro "742617000027" del primer disco de Slipknot, y vino la despedida con triplete feroz: Sic, People=Shit; y el adiós con Surfacing.

      slipknot_3.jpg

Un show espectacular desde todos los puntos de vista. Lo que sí estuvo flojo, flojo es que en una banda del tenor visual de Slipknot no tenga pantallas gigantes a los costados ni en el mangrullo para que lo que están en el fondo puedan ver mejor. Las pantallas estaban eh, pero vaya a saber por qué motivo estuvieron sin utilizarse en todo el recital. Muy mal ahí. 

Pero independientemente de esta detalle -no menor-, fue un reci del carajo. Para los ojos y para los oídos (qué bueno que mejoraron el sonido, después de lo corto que se quedó Geba con System of a Down y Deftones). Y ahora, después de este show que dejó caretas a todos, solo queda esperar que la promesa que hizo Corey Taylor de no dejar pasar otros 10 años para volver, se cumpla...

Esta es la imagen del Setlist de Slipknot en GEBA...

      SETSlip.jpg

A.N.I.M.A.L. y De la Tierra 

La previa de Slipknot también fue salvaje. A puro Poder Latino...A.N.I.M.A.L., con Andrés Giménez, Titi Lapolla y Marcelo Castro, descargaron todo su arsenal con una lista corta, pero recontra potente. Y se podría decir que fue uno de sus mejores shows a nivel sonoro desde el esperado regreso, porque el power trío que revolucionó el metal argentino en los 90 les voló la peluca a todos. Por eso, esos círculos de la muerte, esos coros en cada canción.

Algo que no pasó tanto con el show posterior de De la Tierra. Obvio que esta bandaza latinoamericana integrada por Andrés Giménez (A.N.I.M.A.L.), Andreas Kisser (Sepultura), Alex González (Maná), y el Sr. Flavio (Los Fabulosos Cadillacs), brindó un reci con una jerarquía sonora impecable. 

Sobre todo, el animal Alex, que fue un pulpo arriba de los parches y dejó más que en claro que el metal es lo suyo. Pero la gente no se prendió fuego tanto. Quizá De la Tierra debería venir más seguido por estos pagos, porque el poder que desata es bárbaro. Y además, es un placer ver a músicos con ese nivel de ejecución. En definitiva, una tarde y noche metalera terrible en GEBA. Que vengan muchas más. Las estaremos, esperando...

 




Contacto

Registro ISSN - Propiedad Intelectual: Nº: RL-2025-11499155-APN-DNDA#MJ - Domicilio Legal: Intendente Beguiristain 146 - Sarandí (1872) - Buenos Aires - Argentina Teléfono/Fax: (+5411) 4204-3161/9513 - [email protected]

Edición Nro. 15739

 

Dirección

Propietario: Man Press S.A. - Director: Francisco Nicolás Fascetto © 2017 Copyright Diario Popular - Todos los derechos reservados