El acusado es Juan José Asmundo, quien ya estuvo preso en el marco del secuestro que culminó con un joyero asesinado en 2002, y fue trasladado al Complejo Penitenciario I de Ezeiza.
La carátula determinada por la magistrada prevé entre ocho y 25 años de prisión, mayor a la de "homicidio culposo agravado" -figura que suele usarse en los accidentes de tránsito y prevé entre 2 y 5 años de prisión-.
La jueza estimó que Asmundo debería haber previsto que cabía la posibilidad de generar una tragedia, después de tomar alcohol -el test de alcoholemia posterior al siniestro arrojó un resultado 0,64 gramos de alcohol en sangre- y conducir a alta velocidad.
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Las víctimas del hecho fueron el sargento Adolfo Antonio Carballo (41), quien era docente de la Escuela de Suboficiales de la Policía Federal Argentina (PFA), y su hijo adolescente, Thomas Ezequiel Carballo (17). Ambos regresaban a su casa, en Villa Urquiza, desde Avellaneda, adonde habían ido a ver el partido en el que el equipo del que eran hinchas, Racing, empató 1 a 1 con Defensa y Justicia.
Esta no es la primera vez que Asmundo queda involucrado en un hecho policial, ya que fue condenado a 11 años de prisión en el marco del homicidio de David Solovey (31), un joyero que el 22 de febrero de 2002 fue secuestrado en Liniers y hallado asesinado de tres balazos en un descampado del partido bonaerense de Merlo.
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