Marcelo Mazzeo, el abogado del joven acusado de haber atropellado a seis personas, una de las cuales falleció producto del impacto, aseguró que su defendido "fue encerrado" por el auto Bora, que se encuentra también involucrado en el hecho y que no corría picadas.
En declaraciones a C5N, el letrado explicó que su cliente "niega absolutamente haber corrido una picada" y fundamentó que el episodio se produjo después de que el otro vehículo se le impusiera y como consecuencia perdiera el control.
"Circuló con exceso de la velocidad permitida. Obviamente no tenía ninguna intención de matar", sostuvo el abogado y aclaró que "no hay un solo testigo que haya manifestado algo respecto a que estaba alcoholizado"
Además, Mazzeo explicó que la noche en que se sucedieron los acontecimientos, su cliente había salido con sus amigos y "habían tomado champagne", pero inmediatamente aclaró que sólo tomó una copa.
Y afirmó que su defendido "no se resistió" a hacerse el test de alcoholemia, que "no quiso escapar y que ayudó en todo lo que puso en ese momento. Tengamos en cuenta el estado de shock que tuvo él porque salvó su vida de milagro", aunque aclaró: "no es ninguna víctima. No lo estoy eximiendo de responsabilidades".